Marisa Papen, modelo de Playboy, fue arrestada por la Policía tras realizarse una sesión de fotos desnuda dentro del Vaticano. En una de las imágenes, Papen posaba arrastrando un gran crucifijo de madera con la Basílica de San Pedro al fondo. En otra, aparece sentada sobre dos biblias en la Plaza de la Basílica del Vaticano.
Dos coches de Policía acudieron al lugar cuando la modelo estaba a punto de ponerse la ropa y tanto ella como su fotógrafo, Jesse Walker, fueron detenidos por cuatro agentes. Además, los policías acudieron al apartamento en que ambos se alojaban para un registro y encontraron cruces de madera, así como de ropas de sacerdote, sangre falsa, rosarios y una corona de espinas. La pareja fue puesta en libertad después de pasar 10 horas en dependencias policiales.
Papen utiliza el desnudo en Instagram para sus reivindicaciones. En esta ocasión, aseguró que se mostraba en contra de las instituciones construidas en torno a la religión, puesto que estas "solo velan por el dinero y no poseen alma". Tampoco es la primera vez que se desnuda junto a un templo religioso. También lo hizo en el Templo de Luxor, cercano a la ciudad egipcia de Luxor, y en otros templos de Israel, Turquía y Egipto.
