
Tras la avalancha de críticas entre sindicatos y asociaciones médicas por el borrador del nuevo Estatuto Marco que establecerá las bases para las condiciones laborales de los sanitarios, Mónica García se ha defendido en un vídeo cargando contra el mensajero. La ministra dice que se ve en "la obligación de aclarar" algunos de los puntos ante las, dice, "filtraciones interesadas" y "tergiversaciones de la realidad" de un texto que a su juicio necesita "discreción". "Cargar toda la artillería, contrapropuestas y debates que todavía hay que tener es la manera más rápida para dinamitar el proceso y demostrar las pocas ganas de renovar el Estatuto marco y las muchas ganas de generar miedo entre los profesionales", dice.
Sobre las propuestas en sí, García se queja de los a su juicio bulos que han circulado sobre las guardias, que según su propuesta serán de 17 horas "máximas". "Las horas de guardia no habrá que devolverlas", prometió, "está pendiente de diálogo".
Las tergiversaciones no frenarán los primeros avances en décadas: reducción de 24 a 17h de guardia sin recuperar las horas, impulso de condiciones dignas y avances en el fortalecimiento de nuestro SNS.
Este miércoles 22 reiniciamos el diálogo social con el ámbito profesional… pic.twitter.com/K5LypaS9Pi
— Mónica García (@Monica_Garcia_G) January 20, 2025
Respecto a la iniciativa más criticada, la de la incompatibilidad con la sanidad privada de jefes de servicio y otros altos cargos, García alega que ya está debatiendo en algunas autonomías y "otros países". "Nadie se imagina trabajar en Coca Cola y Pepsi", defiende dejando claro que seguirá defendiendo una propuesta que ha recibido críticas incluso del sindicato Amyts, muy próximo a la ministra desde su época de líder de la oposición a Isabel Díaz Ayuso.
"Sabemos que genera conflictos de interés y malas prácticas que perjudican a nuestro Sistema Nacional de Salud", se reafirma García, señalando que esa exclusividad debería ir acompañada de una mejora en las retribuciones que tendrán que asumir las autonomías además de "liberarles de la carga burocrática".
En cuanto a otra exclusividad que ha levantado ampollas, la de los MIR durante cinco años tras su formación en la sanidad pública, García se ha limitado a decir que se van a buscar fórmulas para retener el talento, tras las advertencias de que la ocurrencia de Sanidad provocaría precisamente una fuga de profesionales jóvenes. Se retendrá el talento, ha dicho, "en condiciones dignas, estabilidad laboral y retribuciones justas, nunca en obligaciones, especialmente en las realidades más inestables".
"Tiene que quedar muy claro: estamos abiertos a propuestas que prioricen el bienestar y las condiciones dignas de nuestros profesionales, siempre en coordinación con las comunidades autónomas, responsables de gestionar todos estos incentivos", señala García, que añade que sus compromisos principales en esta negociación que se reinicia este miércoles son "guardias justas, retención del talento y condiciones laborales dignas".