
Somos muy buenos. No tengáis ni una sola duda sobre eso. España es una de las grandes potencias en el mundo del cómic con dibujantes que no solo fascinan a los lectores sino que también tienen sus merecidos reconocimientos en premios como los Eisner. Llevo muchos meses poniendo ejemplos, ya sean Jorge Fornés con Rorschach o Calle Peligro, Jorge Jiménez con Batman, Belén Ortega con Catwoman, Carmen Carnero con el Capitán América, Adrián Bonilla con Alkaios o este The Nice House on the Lake con el bueno, nunca mejor dicho, de Álvaro Martínez Bueno.
Porque algunas obras son buenas si el guion es sublime y el dibujo aceptable. Pero esas mismas obras son geniales si a ese guion sublime se le suma un trabajo espectacular como este de Álvaro. Y si ya le añades a una colorista de un talento descomunal, como Jordie Bellaire, lo que te queda es una de las mejores lecturas de 2023 que por fin de empieza a recopilarse de manera integral en tapa dura. De hecho ya hay dos opciones para tenerla, aparte de las grapas que han ido saliendo anteriormente. Puedes comprar el Focus con un recopilación más pequeña o este nuevo tomo que contiene todo lo que sería la primera temporada de esta historia. 12 grapas en concreto.

Enseguida os cuento de qué va esta historia y cuáles son sus puntos fuertes y débiles, pero antes vamos con el apartado técnico: guion de James Tynion IV, dibujo de Álvaro Martínez Bueno, color de Jordie Bellaire, editorial ECC, cartoné tapa dura, 384 páginas y un precio de 44,50 euros.
Vamos con la reseña
El fin del mundo... ¿Con amigos?
Imagina que tienes un amigo que ha marcado tu vida por diferentes motivos. A ti y al resto del grupo. Pasan los años y siempre ha estado ahí. Influyendo en ti. Generando historia propia junto a ti. Pues bien, este amigo, siempre misterioso, decide organizar una maravillosa escapada con sus amigos más importantes y los lleva a una espectacular casa en el lago donde hay absolutamente de todo. Todo el lujo que te puedas imaginar a tu disposición en un sitio idílico para desconectar del estrés y reconectar con tus amigos. ¿Qué podría salir mal? La verdad es que todo, según nos cuenta aquí James Tynion IV.

Este The Nice House on The Lake nos narra la historia de un grupo de amigos que, sin comerlo ni beberlo, se encuentra en mitad del fin del mundo, con todos sus seres queridos muriendo fuera, mientras ellos están atrapados en una casa con Walter, el ‘colega’ que ha organizado esta escapada. ¿Quién es Walter? Mejor dicho... ¿Qué es Walter? Eso es lo que tendrán que ir descubriendo los personajes grapa a grapa. Ahí empieza el maravilloso misterio que firman Tynion y Bueno.
Con un ritmo pausado, pero estudiado al milímetro, Tynion IV nos va presentando a cada personaje al inicio de las grapas y siempre con un guiño a lo que ocurrirá en el futuro. El guionista va tejiendo su telaraña de personalidades y sucesos para, de vez en cuando, meter un giro de guion tremendo que deja al lector sentado y con los ojos abiertos. Eso sí, no esperes continuamente esos giros ya que Tynion prefiere, con acierto, ir desarrollando bien el contexto previo y las personalidades antes de ir regalando soluciones a un puzzle que se volverá frenético en las últimas grapas. Puzzle, por cierto, que engancha al lector desde la primera grapa y que le somete a un entretenidísimo y fascinante estudio individual y personal sobre las pistas que le van dando. Este cómic te invita a investigar. Te invita a resolverlo. Y eso es un entretenimiento mayúsculo.
Por otro lado, estamos ante una historia con muchos personajes y eso hace que por momentos te pueda abrumar, sobre todo si pausas mucho la lectura o pones mucho tiempo de por medio entre grapa y grapa. Ahí está parte de la magia, por supuesto. Eso pasó con la publicación mensual, que tuvo alguna que otra pausa, sin embargo, tenerlo todo en un mismo tomo hace que puedas centrarte en la historia leyendo todo del tirón y teniendo así que ir siempre hacia delante sin tener que releer lo anterior. Ojo, no es una historia confusa ni mucho menos. Se adapta bien a todo tipo de lectores aunque bien es cierto que un público adulto tendrá mas capacidad de inmersión que uno más joven, obviamente.
Lo bueno de The Nice House on the Lake es que engancha de manera brillante. Cuando desvela poco o cuando desvela mucho. Te tiene hipnotizado y eso solo se puede conseguir si además de un buen guion hay un dibujante que se adapta perfectamente a lo que se está contando. Eso ocurre con Álvaro Martínez Bueno, que se muestra muy sólido a lo largo de las doce grapas y no baja nunca del sobresaliente. El color de Bellaire logra además que ese toque misterioso, apocalíptico, interdimensional y tétrico pueda pasar de 0 a 100 o de 100 a 0 en una sola página. Igual que nos encontramos un bonito atardecer con barbacoa y paseo en barco, nos hallamos después en un bosque oscuro o en un edificio extraño que mezcla realidad y elemento oníricos. Aparte de la simbología y de, si no me equivoco, varios homenajes a las esculturas de Chillida a San Sebastián, lugar donde vive Álvaro.
Os dejo varios ejemplos:


Por otro lado, Tynion y Álvaro usan muchísimos recursos narrativos que van más allá de los dibujos, como por ejemplo cartas, mails, mensajes de móvil, el uso de Internet... Todo ello siempre incluyendo una serie de pistas o elementos sobre la trama principal y la resolución final de lo que está ocurriendo. Y no son recursos para lucirse, que también, sino aspectos que el lector agradece a la hora de ir leyendo y releyendo, porque esta obra te invita a varias lecturas para sacar todo el jugo posible de ella. Ojo, estamos en lo que sería la primera temporada de esta historia, es decir, Tynion y Bueno prometen mucha más guerra y viendo el trabajazo que se han marcado en la apertura de la historia, a buen seguro que tendrán una legión de fans esperando novedades. Y más teniendo en cuenta que quizá el final deja todo en el aire. Aún así, aquí importa más lo que se va sintiendo durante el camino que con el final, ya que habrá continuación. Queda mucho misterio en ese lago y nosotros estaremos ahí para contarlo.
Conclusión: se llevó el premio Eisner a mejor serie nueva por algo. Estamos ante una historia que mezcla géneros de varios tipos, incluyendo la ciencia ficción, el misterio y por momentos el terror. El dibujo de Álvaro es de los que hacen amantes del cómic y el color de Bellaire es la guinda del pastel. Si buscas una historia elaborada y para disfrutar con un buen café y una música que te sumerja en un momento de tranquilidad y relajación, aquí tienes una buena opción. Además, es de esas obras que una vez terminadas das vueltas una y otra vez pensando y buscando si eso que viste tiene algo que ver con el final o si ese detalle que pasaste por alto puede ayudarte a resolver más partes del misterio. Si gustan, disfruten de la lectura.

