
El español es el segundo idioma más hablado en el mundo, con un total de 585 millones de usuarios. Además, una de las características de esta lengua es su riqueza en cuanto a vocabulario y léxico, ya que en el Diccionario de la lengua española hay un total de 93.000 palabras registradas por la Real Academia Española (RAE).
Para que una palabra sea reconocida, la RAE ha establecido que debe conocerse en tres países distintos pertenecientes al ámbito hispano y no ser un término pasajero, sino que debe haberse utilizado durante un periodo de tiempo determinado. Sin embargo, pese a este criterio, existen algunas palabras que no son conocidas por la mayoría de los usuarios.
Palabras desconocidas
Algunos ejemplos de palabras curiosas y extrañas son: "babélico", perteneciente a la Torre de Babel, que también cuenta con otra acepción en el diccionario: "confuso, ininteligible"; "bahorrina", que significa "conjunto de muchas cosas asquerosas mezcladas con agua sucia"; "depauperar", verbo que es sinónimo de debilitar o empobrecer; y "ful", que no se trata de la palabra inglesa "full" (‘lleno’) escrita incorrectamente, sino de "falso, fallido" según la RAE.
Otras palabras que suscitan dudas entre los usuarios son: "gaznápiro", adjetivo que se utiliza para describir a alguien torpe, simple, memo o paleto; "uebos", sinónimo de "necesidad" que está en desuso; "zonzo", adjetivo utilizado para referirse a una persona sosa y simple; "lobanillo", que puede significar dos cosas distintas según el contexto: "excrecencia leñosa cubierta de corteza, que se forma en el tronco o las ramas de un árbol", o "bulto superficial, y por lo común no doloroso, que se forma en la cabeza y en otras partes del cuerpo"; "ochavo", que también alberga muchos significados, como sinónimo de "octavo", el nombre de una antigua moneda española, el vado de la acera, una fiesta religiosa (ya no existente) que duraba ocho días, o para referirse a algo de poco valor e insignificante.
Imaginario popular y nuevas incorporaciones
Aunque puede que estas palabras nunca hayan sido escuchadas o utilizadas por los usuarios, no significa que no haya otras más conocidas, como por ejemplo "sacamantecas", que la RAE ha definido como "criminal que abre el cuerpo a sus víctimas para sacarles las vísceras" y "ser imaginario con que se asusta a los niños", por lo que quizá este término sea más conocido debido a su presencia en el imaginario popular.
Además de las palabras comentadas, la RAE sigue actualizando el diccionario e incorporando nuevos términos como "atarván" (persona maleducada y grosera), "galdosista" (referente a Benito Pérez Galdós) o "veragua" (sobre todo utilizado en Sudamérica para la ropa húmeda que no se tiende), lo cual indica que el idioma español sigue vivo.


