Abre sus puertas la Galería de las Colecciones Reales

Ha sido un arduo y largo camino que se ha prolongado por un cuarto de siglo, pero ya ha abierto sus puertas la Galería de Colecciones Reales, un espacio museístico de 40.000 metros cuadros que reúne todo el arte que los monarcas españoles han ido coleccionando desde hace cinco siglos. Hay un espacio de exhibición de 20 mil metros cuadrados donde el visitante encontrarás 650 de las 170.000 piezas custodiadas por Patrimonio Nacional. Un tercio de las obras expuestas irán rotando. Hay cuadros de Velázquez, Caravaggio o El Greco, bordados, fotografías, abanicos, carruajes, armas, monedas o libros, confeccionados o diseñados por los mejores artistas y artesanos de la época. La primera sala está dedicada a los Austrias, la segunda a los Borbones y la tercera a las exposiciones temporales. Es un itinerario cronológico que permite ver además cómo evoluciona la moda con el paso de los siglos. Además, cuenta con 20.000 m² de almacén. Según explicó, durante su inauguración, la directora de Patrimonio Nacional, Ana de la Cueva, en la selección de piezas se ha tenido especial cuidado para no descapitalizar algunos de los Reales Sitios cogiéndoles sus objetos más significativos.Esta galería, que por cuestiones jurídicas no se puede llamar museo, ha requerido una inversión de 172 millones de euros, de los que 139 millones han sido destinados a la construcción del edificio y 17,7 millones de euros a la museografía. Se trata de una nueva apuesta cultural de la ciudad de Madrid, que, según los expertos, hará que los turistas pernocten un día más en la capital.

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Políptico de Isabel la Católica

En la primera sala, las piezas mas antiguas dan la bienvenida al visitante. Hallamos objetos correspondientes al final de la Casa de Trastámara, con obras tan singulares este Políptico de Isabel la Católica de Juan de Flandes. Es un conjunto de quince tablas de pequeño formato con escenas de la vida de Cristo, destinadas al uso devocional de Isabel I de Castilla.

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Reloj-candil de sobremesa (Hans de Évalo)

Felipe II fue un gran coleccionista y uno de los mayores mecenas de la Europa del Renacimiento. Este reloj forma parte del importante conjunto de objetos mecánicos y científicos que llegó a reunir y uno de los primeros ejemplos de reloj nocturno fabricado en el viejo continente. Alrededor del mecanismo se ubica el recipiente para el aceite que alimenta el candil.

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'Caballo Blanco', de Diego Velázquez (1634-1638)

Se cree se podría tratarse de un modelo para otros retratos ecuestres. Velázquez era el pintor de cámara de Felipe IV. En la exhibición, hay otras obras del sevillano como Retrato del Conde Duque de Olivares.

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Carlos IV en uniforme de coronel

Francisco de Goya retrató al monarca Carlos IV en uniforme de coronel de Reales Guardias de Corps.

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La reina María Luisa de Parma en traje de corte

Goya retrató a la reina en traje de corte, sobre el que destaca la banda e insignia de su orden.

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Columnas salomónicas

Son lo primero que verá el visitante. Se trata de cuatro columnas salomónicas de Francisco de Herrera “el Mozo” y José Simón de Churriguera fechadas entre 1674 y 1678. El conjunto perteneció al principal retablo de la desaparecida iglesia del Real Patronato del Hospital Virgen de Montserrat, en el entorno de Antón Martín, en Madrid. Cada una de las columnas está ensamblada con ocho troncos de pinos de los bosques de Valsaín, en Segovia.

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Dessert del Príncipe don Carlos

Los desserts decoraban el centro de las mesas en los grandes banquetes de gala.

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El Arcángel San Miguel venciendo al demonio

Esta escultura de 1692 es la de sevillana Luisa Roldán, conocida como La Roldana, la primera mujer española en obtener el título de escultora de Cámara en la corte, de manos de Carlos II, título que posteriormente refrendaría Felipe V. ‘

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La carroza negra

Esta carroza perteneció a la reina Mariana de Austria, segunda esposa de Felipe IV. Se trata de un lujoso carruaje en madera de nogal, de moda en Francia, y datada hacia 1670.

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'Paisaje con San Cristóbal y el niño' (hacia 1521)

Este Paisaje con San Cristóbal y el niño de Joachim Patinir es una de las obras más importantes de la última etapa de producción del pintor flamenco. Incluye pequeñas escenas sobre los peligros y amenazas que asolan el mundo.

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'Cristo Crucificado', de Tiziano

Este Tiziano se hallaba en la Sacristía de la Basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

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Hércules sostiene la esfera terrestre

El visitante podrá disfrutar de gran variedad de tapices de alta calidad como este de 1530 atribuido al comerciante Georg Wezeler o un tapiz de Rubens procedente de las Descalzas Reales diseñado por encargo de Isabel Clara Eugenia, gobernadora de los Países Bajos, entre otras piezas.

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Silla de manos de Bárbara de Braganza

Esta silla de mano de Corrado Giaquinto (1753-1758) perteneció a la reina Bárbara de Braganza, quien la utilizó para desplazarse por los Reales Sitios. La pintura que decora los diferentes paneles es un himno a la paz y la armonía, con amorcillos recolectando frutos, cazando o entretenidos en juegos dionisíacos. Los instrumentos musicales que decoran la talla aluden a los gustos musicales de la reina.

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Arnés de Mühlberg

Esta armadura forma parte de la guarnición para la guerra fechada en 1544, probablemente la última que Desiderius Helmschmid forjó para el emperador. Está decorada con anchas bandas doradas.