Una entrevista a David Lynch en la revista Sight & Sound ha despertado la alarma en sus seguidores. El director de Terciopelo azul y Corazón Salvaje ha confesado sufrir un enfisema pulmonar que le impide salir de casa y, por tanto, retomar sus labores de director de cine.
"Estoy confinado en casa, me guste o no. No puedo salir. Y solo puedo andar distancias cortas antes de quedarme sin oxígeno. Debido al covid, sería muy malo para mí enfermarme, incluso con un catarro".
"Fumar era algo que me encantaba, pero al final me ha hecho daño. Era parte de mi vida de artista: el olor del tabaco, encenderlo, fumar y sentarme mirando tu trabajo o pensando en cosas: nada en este mundo es tan hermoso. Y ahora me está matando", reveló el cineasta de 78 años.
Lynch, en todo caso, no descarta volver a retomar su trabajo como director de manera telemática. "Me gusta estar entre las cosas y sacar ideas de allí", dice sobre personarse en el rodaje. "Pero lo intentaría por remoto si surgiera la posibilidad", asegura, dejando abierta la posibilidad.
El último gran proyecto del realizador fue la secuela de Twin Peaks, una tercera temporada ideada para Showtime que se estrenó con gran expectación en 2017, aunque nunca ha cesado su realización de cortometrajes o videoclips, como los realizados para Chrystabell en su nuevo álbum Cellophane Memories.