Andrés Arconada habla esta semana de Niégalo siempre, una "comedia que me ha divertido mucho". Pese a la reticencia de Arconada a "las comedias francesas, en esta ocasión me encuentro con un guion muy inteligente, con unos actores en estado de gracia, con película que va a divertir porque tiene muchos giros y un final estupendo".
François Marsault (André Dussollier), un general del ejército retirado, sigue locamente enamorado de su esposa Annie (Sabine Azéma). Tras 50 años de feliz matrimonio, él descubre mediante unas cartas de amor que ella le engañó 40 años antes y no se le ocurre otra idea que buscar al antiguo amante para pegarle. Por supuesto, ella le acompañará en este loco viaje. Película basada en hechos reales que tanto divirtió al director cuando la leyó en la prensa que decidió llevarla al cine.