Rocoso, físico y sin lugar a la improvisación. Así arrancó el partido entre Atlético de Madrid y Juventus y se extendió durante toda la primera mitad. Simeone prescindió de Griezmann arriba y colocó a Saúl para dar más empaque al centro del campo, mientras Koke y Tiago se instalaban en el doble pivote para intentar crear a partir de su visión de juego sumada a la Arda Turan. La Juventus no cayó en el juego defensivo y planteó el partido de manera muy ordenada, sin fisuras, pero sin renunciar al ataque.
El paso de los minutos dejó claro que el Atlético tendría que sudar sangre para ganar ya que la Juventus evidenció un poder casi insultante en el centro del campo y en la defensa. No había rebote, balón dividido o jugada embarullada que no acabara en un jugador italiano y casi todas acabaron con Pogba demostrando su fama de titán en la medular. El francés dio una lección de cómo defender, controlar el centro del campo y atacar, todo a la vez.
Hubo que esperar hasta el minuto 24 para ver una oportunidad y fue para el Atlético. Jugada dividida, por una vez no acabó en los pies de un jugador de la Juventus, y parada de Buffon tras el tiro desde fuera del área de Mandzukic. No hubo más peligro por parte del bando rojiblanco y sólo un tiro desviado de Pogba acumuló otra ocasión más en el partido.
Al descanso se llegó con un Atlético desesperado y una Juventus demasiado tranquila. Con Koke en el doble pivote y Arda sin compañero de creación arriba, el conjunto rojiblanco anhelaba algo más de inspiración.
Koke y Arda no podían ellos solos con la muralla casi indestructible de la Juventus y a los pocos minutos del inicio del segundo acto entró Griezmann. El francés dejó fuera a Saúl y el Atlético se volvió más ofensivo. Los visitantes bajaron el nivel lo justo para dar alas a los locales que volcaron más el campo en dirección a la portería de Buffon. Un posible penalti por mano y algún balón que se paseó por el área italiana fueron las mejores opciones del Atlético de Madrid.
Simeone y los suyos tardaron muy poco en darse cuenta que esta Juventus no te concede demasiado tiempo de respiro y el paso de los minutos devolvió el empaque a los visitantes que dominaron más el balón en la totalidad del encuentro. Sin fallos en el rival es muy difícil ganar, pero el Atlético no cesó en su empeño poniendo el corazón en cada jugada, algo que le sobra a este equipo cuando no se encuentra el camino del gol.
La afición ya atisbaba un empate a cero insulso cuando llegó el héroe de la noche. Es turco, luce el 10 a la espalda y se llama Arda Turan. Centro de Juanfran desde la derecha y, ante la sorpresa de todo el mundo visto lo visto en lo que se llevaba de partido, Arda encuentra un hueco en la defensa rival, conecta con el balón y bate a Buffon. Un solo error de la Juventus en todo el partido y el Atlético lo rompía todo: el partido, el grupo, la invencibilidad de la Juventus y la todavía no perforada portería de Buffon. El Atlético de Simeone tiene detalles de campeón y el regente del trono de Italia lo comprobó.
La recta final fue un carrusel de cambios, ofensivos en la Juventus y defensivos en el Atlético. El oficio que había utilizado el equipo de Allegri también lo demostró el equipo de Simeone en la recta final y aguantó a la perfección el marcador. Atenas queda olvidada, tres puntos al bolsillo y grupo precioso: todos con tres puntos.
Ficha técnica
Atlético de Madrid, 1: Moyá; Juanfran, Miranda, Godín, Ansaldi; Tiago; Raúl García, Koke, Saúl (Griezmann, m.53), Arda (Siqueira, m. 90); y Mandzukic (Mario, m. 84)
Juventus, 0: Buffon; Cáceres (Pereyra, m.78), Bonucci, Chiellini; Lichtsteiner (Giovinco, m.90) , Vidal (Morata, m.83), Marchisio, Pogba, Evra; Tévez y Llorente
Gol: 1-0, m.75: Arda Turan
Árbitro: Félix Brych (Alemania). Amonestó a Raúl García (m.55) y Ansaldi (m.63), del Atlético de Madrid; y a Bonucci (m.13), Chiellini (m.57), Lichtsteiner (m.85), Morata (m.86), Pogba (m.90) y Giovinco (m.93), de la Juventus
Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada del grupo A de la Liga de Campeones, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 52.000 espectadores