Hace seis meses la renovación de Sergio Ramos era casi un hecho. A día de hoy, ni siquiera hay negociación. Pese a que su contrato termina en dos temporadas, el jugador quiere ampliar su vinculación. Eso sí, con una subida de sueldo que, según deslizan desde el Bernabéu, podría ser la causa de que el agente de Ramos, no haya recibido "ninguna llamada" del Real Madrid.
René Ramos, agente y hermano del futbolista, ha realizado unas declaraciones que ponen más aún en duda el futuro del central en el Real Madrid. "Sergio no se quiere ir del Real Madrid", afirmaba en Radio Marca. Una declaración que no tendría más recorrido si no le hubiera completado con un "de momento".
La cuestión es que ese "de momento" se ha repetido en varias ocasiones más. Ante esa coletilla que dejaba la puerta abierta a una salida del Real Madrid, el periodista le realizaba una pregunta directa cuya respuesta en condiciones normales debería ser contundente. "¿Quiere irse del Madrid?", le preguntaban. "De momento no. El día que se lo plantee, todos nos enteraremos pero de momento no", respondía. René Ramos volvía a insistir en un mensaje que no es casual. "De momento no", afirmaba hasta en tres ocasiones.
El jugador ya ha manifestado en varias ocasiones que no le importaría prorrogar su contrato y ahora su agente dice que está esperando una llamada que no se ha producido. Entonces, ¿Por qué no hay ni si quiera negociaciones? ¿Por qué el Real Madrid no prioriza la renovación de su segundo capitán? Porque Sergio Ramos ya es el tercer jugador mejor pagado de la plantilla y, según La Sexta, pide cobrar 20 millones de euros netos por temporada. Una cantidad que le situaría sólo por detrás de Cristiano Ronaldo.
Según ha podido saber Libertad Digital, en el club ni si quiera se plantean una cantidad cercana a esta. Quieren que Sergio Ramos continúe pero no a cualquier precio. Las diferencias son tan grandes entre lo que pide uno y ofrece el otro que han provocado esta situación incómoda. Por eso, en su última comparecencia pública, el jugador lanzó varios mensajes envenenados a la directiva y concluyó con una frase que explica a la perfección como está su renovación: "Bastante aparcada".
Entre la salida de Iker Casillas y la negociación de su finiquito y la renovación de Sergio Ramos, Florentino Pérez tiene por delante unos meses complicados.