Sin hacer ruido, a la sombra de quienes se jugaron el campeonato la pasada campaña, Real Madrid, Barcelona y Atlético, e incluso de la renovada pujanza económica del nuevo Valencia de Peter Lim, el Sevilla se ha situado colíder de la Liga, después de una agónica victoria ante el Villarreal en cinco minutos que le ha permitido conseguir el mejor arranque de su historia.
Siete victorias, un empate y una derrota le han permitido sumar 22 puntos y colocarse igualado con el FC Barcelona. La Liga está en dos puntos, los que separan a sevillistas y culés de Atlético y Valencia, que cuentan con 20 puntos. En medio, el Real Madrid se mantiene al acecho con 21.
La ilusión se ha desatado en el Sánchez Pizjuán, el estado de forma del equipo ha despertado un sentimiento que hacía varias temporadas que no se veía. El conjunto que dirige Unai Emery pelea por la primera plaza después de realizar una severa renovación de su plantilla en las dos últimas campañas.
Los fichajes de esta temporada parecen haberse asentado a la perfección en el equipo y a ello hay que añadir el espectacular estado de forma de algunos futbolistas. El delantero colombiano Carlos Bacca es el ejemplo perfecto de que este año el Sevilla quiere aspirar a todo. Ha marcado ya siete goles y es uno de los máximos goleadores del torneo. Nadie esperaba en la ciudad que su equipo pudiese estar comandando la Liga, pero esta temporada se ha abierto la veda para soñar.