El delantero argentino ha sacado una gran ventaja al resto de candidatos al obtener 1.073 puntos en la votación, en la que han participado entrenadores y capitanes de 147 selecciones nacionales, mientras que Cristiano Ronaldo ha sido segundo 352 puntos. Xavi ha logrado 196 puntos; Kaká, 190; y Andrés Iniesta, 134.
Según una relación de votos facilitada por la FIFA, Iker Casillas votó por Ronaldo, Kaká (ambos sus compañeros en el Real Madrid) y Messi. Por su parte, el seleccionador español de fútbol, Vicente del Bosque, eligió a Messi, seguido de Ronaldo y votó como tercer mejor jugador a Didier Drogba (Chelsea).
Al subir al estrado para recibir el trofeo ante el auditorio que llenó el Kongresshaus de Zúrich, Messi agradeció ante todo a los jugadores y entrenadores que votaron por él, así como a sus compañeros de equipo. "Esto significa terminar un año magnífico para el Barcelona, para mis compañeros y para mí mismo", declaraba. Minutos después, al abandonar el Kongresshaus, Messi dijo -consciente de que "será una tarea difícil"- que el Barça intentará repetir en 2010 sus logros de este año.
Messi, que llegó a España a los trece años con su familia que escapaba de la crisis económica en su país, defendía ante la prensa horas antes de la ceremonia su lealtad hacia Argentina y hacia la selección albiceleste, rechazando las críticas de que juega mejor cuando lo hace por el club azulgrana. "Me molesta porque no es así. Soy argentino y siento la camiseta como el que más. He tenido la suerte de conseguir todo con mi club y me encantaría hacer lo mismo con la selección argentina", aseguraba.
Pero la gala anual de la FIFA no sólo ha sido el momento cumbre de la carrera de Messi, sino del fútbol español en su conjunto, pues todos los candidatos este año juegan en la Liga española, que muchos consideran hoy la mejor del mundo. La victoria de Messi, así como la nominación de Iniesta y Xavi, también son el triunfo del Barcelona y de su entrenador, Pep Guardiola, que tomó las riendas del equipo hace ahora 18 meses. Los tres jugadores agregan una suerte de "séptimo" título a los seis que el Barça ha ganado en la temporada que finaliza, en cada uno de los torneos en los que ha participado.
Liderado por Messi, el equipo azulgrana arrebató al Manchester United la Liga de Campeones y demostró que los traspasos millonarios de jugadores -como los protagonizados en 2009 por Kaká y Ronaldo hacia el Real Madrid- no hacen necesariamente la gloria de un club. El Barcelona es el campeón español, europeo y, desde su victoria en Abu Dabi sobre Estudiantes de La Plata, también mundial, y ahora cuenta con el mejor jugador del planeta.
Todos los candidatos al premio reconocieron, horas antes de confirmarse el triunfo de Messi -que todos daban por descontado- que la nominación de este último, junto con Xavi y Iniesta, refleja el éxito del modelo de formación de este club, donde estos tres juegan desde temprana edad.
Distinguido a tan sólo 22 años con gran parte de todos los honores a los que cualquier futbolista podría aspirar, Messi llevará la camiseta número 10 cuando participe con la selección argentina en el Mundial de Sudáfrica 2010 bajo la batuta de Diego Armando Maradona, quien ya le ha declarado su heredero. Sin embargo, ni Maradona ni Javier Mascherano votaron por ninguno de los nominados. El primero dio su voto a Drogba, Wayne Rooney y Zlatan Ibrahimovic, mientras que el segundo eligió a Michael Essien, Steven Gerrard y Thierry Henry.