El Hyundai Tucson es el modelo más vendido de la marca en Europa desde su lanzamiento en 2015. Para mantener ese liderazgo en el mercado, se renueva con novedades que afectan sobre al equipamiento tecnológico y a los motores. También recibe ligeros retoques de diseño, con una nueva parrilla en cascada, firma luminosa con faros full Led, un paragolpes delantero más elevado, protecciones delanteras, llantas de nuevo diseño, nuevos pilotos traseros y paragolpes trasero rediseñado. Los cambios llegan este mismo verano.
La mayor novedad reside en que el Tucson será el primer modelo de la marca en incorporar un sistema de hibridación ligera, con un motor eléctrico de 48 V asociado a un motor diésel. Se trata de un sistema similar al que ha anunciado Kia para su modelo Sportage. En un primer momento, se ofrecerá con el motor diésel 2.0 de 186 caballos, el tope de la gama, y se combinará con tracción total y cambio manual de 6 velocidades o automático de 8. En primavera de 2019, también estará disponible con el nuevo motor 1.6 diésel –sustituye al 1.7 CRDI–, con 115 y 136 caballos.
Este sistema de propulsión cuenta con una batería de 48 V, un generador de arranque híbrido suave (MHSG), un convertidor de baja tensión y un inversor y se encarga de ayudar al motor de combustión a circular a baja velocidad o para proporcionar un par adicional en una aceleración fuerte. En las fases de deceleración y frenado se recupera la energía para recargar la batería. De esta forma, mejoran las prestaciones y la eficiencia, de modo que se rebaja el consumo de combustible en un 7%. En esa apuesta por el medioambiente, todos los motores de la gama Tucson cumplirán, además, con los nuevos estándares de emisiones incluidos en la normativa Euro 6d Temp.
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