No son muchos los ejemplos de SUV descapotables que existen en el mercado -Nissan lanzó en EEUU un Murano Cabrio y Land Rover cuenta con el Evoque Cabrio… y poco más-. Por eso es tal vez más llamativa la apuesta de Volkswagen por este T-Roc Cabrio, un coche de características ‘populares’, que se volverá más exclusivo con esta versión. El nuevo T-Roc Cabrio, que se presenta oficialmente en el Salón del Automóvil de Fráncfort a comienzos de septiembre, está desarrollado sobre la misma plataforma que su hermano ‘cerrado’, pero crece en tamaño, tanto en longitud -3,4 centímetros más- como en su distancia entre ejes, para ofrecer una buena habitabilidad.
Así, el nuevo T-Roc Cabrio, que solo contará con dos puertas y con cuatro plazas en su interior, ofrece no solo espacio para almacenar el mecanismo de la capota de tela sino también unas destacables medidas para que los pasajeros disfruten de la mayor comodidad. Por ejemplo, la anchura en el interior es prácticamente idéntica que en el T-Roc normal y en cuanto a la cota de altura, la distancia al techo en las plazas traseras hace que un pasajero de 1,90 metros de altura ni siquiera roce en el techo. En cuanto al maletero, con 284 litros de capacidad, ofrece 141 menos que en su hermano, pero cuenta con asientos traseros abatibles para ampliar su capacidad.
Para la parte mecánica, en Volkswagen se han olvidado de los motores diésel, pues este propulsor no cuadra mucho con el cliente de este tipo de modelos que suele realizar pocos kilómetros al año. Contará con dos motores de gasolina con turbocompresor. El primero de ellos es el 1.0 tricilíndrico de 115 caballos con cambio manual de seis velocidades. Y por encima aparece un cuatro cilindros con 150 caballos, cambio manual de serie y, en opción, la caja de doble embrague DSG con siete velocidades. Solo podrá ser tracción delantera y cuando llegue al mercado lo hará con dos acabados, Style y R-Line.
Más información del Volkswagen T-Roc Cabrio.