El alero LeBron James, con un doble-doble de 32 puntos y 10 rebotes, ayudó a los Miami Heat a ganar 102-90 a los Indiana Pacers en el cuarto partido de la serie de las Finales de la Conferencia Este que dominan por 3-1 al mejor de siete.
Si los Heat ganan el próximo miércoles en el Bankers Life Fieldhouse de Indianápolis, el equipo de Miami logrará por cuarta vez consecutiva el pase a las Finales de la NBA, que han ganado las dos últimas temporadas y buscarán conseguir el tercer título seguido de campeones.
James no quiso entrar en la provocación dialéctica que le hizo el escolta Lance Stephenson, de los Pacers, al decir que le veía nervioso y anotó 32 puntos vitales para el triunfo de su equipo. El veterano pívot Chris Bosh también reivindicó su condición de titular y aportó 25 puntos, incluidos tres triples de cinco intentos, capturó seis rebotes y puso un tapón.
Bosh junto a los hombres altos de los Heat completaron una gran labor en el marcaje del pívot jamaicano Roy Hibbert, que volvió a desaparecer en el juego de los Pacers al irse sin conseguir puntos y capturar sólo cinco rebotes.
27 faltas personales
La agresividad en el juego ofensivo de los Heat en sus penetraciones a canasta obligó a los Pacers a cometer 27 faltas personales por 17 de los actuales bicampeones de liga. El alero Paul George anotó 23 puntos, capturó siete rebotes y repartió tres asistencias, pero perdió cinco balones.
Los Heat controlaron el ritmo del juego y el marcador, en el que siempre estuvieron por delante desde el inicio y llegaron a tener hasta 23 puntos de ventaja en el cuarto periodo. El partido se rompió en el tercer periodo a favor de los Heat al conseguir un parcial de 31-20, que incrementaron la ventaja a 23 en el cuarto antes de que los Pacers diesen algo de emoción al hacer una racha de 15-3 con 3:20 minutos por jugarse y se pusiesen a sólo nueve tantos (99-90).
Pero eso fue todo lo que consiguieron los Pacers, que de nuevo reaccionaron demasiado tarde y ellos mismos se colocaron al borde del abismo de la eliminación por segunda temporada consecutiva y ante el mismo "verdugo".