Tras la inolvidable última noche en la liga regular, este sábado, 16 de abril, arrancan los playoffs de la NBA. La espectacular despedida de Kobe Bryant marcó el último día previo a que arranquen las eliminatorias, en la que los históricos Golden State Warriors, tras superar el récord de los Chicago Bulls de 1996, y alcanzar la cifra de 73 victorias por sólo 9 derrotas en la regular season, son, sin discusión, los grandes favoritos. La principal decepción del año, sin duda, los Chicago Bulls de Pau Gasol, que no disputarán las eliminatorias por el anillo pese a partir como unos de los favoritos al mismo al inicio del curso.
Conferencia Oeste
Golden State Warriors (1) - Houston Rockets (8):
Dos franquicias en un estado de forma completamente opuesto, deportivamente y extradeportivamente. Mientras los californianos vienen de convertirse en el mejor equipo de la historia, al menos en lo que a liga regular se refiere, los tejanos, finalistas del Oeste hace un año, y de los que se esperaba un paso al frente éste, han sido un desastre absoluto, salvado a última entrando en los playoffs por la puerta de atrás. La interminable coralidad de los de la Bahía de San Francisco no debería encontrar apuros ante unos Rockets en los que James Harden es sin discusión la gran amenaza. Sin embargo, en la ciudad de la NASA no parecen tener suficientes argumentos para frenar, salvo sorpresón mayúsculo, el juego diabólico y velocísimo de los Curry, Thompson, Green y compañía.
Predicción: Warriors 4-0 Rockets.
San Antonio Spurs (2) - Memphis Grizzlies (7):
Seguramente, el gran enemigo para los Warriors, por encima de los Cavaliers, archifavoritos del Este, son los sempiternos San Antonio Spurs. Su fantástica temporada (67-15) queda en parte eclipsada por el balance warrior, lo nunca visto. Los hombres de Popovich practican un baloncesto colectivo de altísimos kilates, con Kawhi Leonard erigido ya en el líder sobre la cancha, escoltado de una pléyade de veteranos, desde el mayor de todos, Tim Duncan, a LaMarcus Aldridge, pasando por Duncan, Parker o Ginóbili. Además, varios secundarios de lujo, con su papel perfectamente conocido. En definitiva, una máquina perfectamente engrasada de hacer baloncesto en equipo, dispuesta a aprovechar el más mínimo desliz para alcanzar otro anillo y seguir demostrando ser el mejor equipo de las dos últimas décadas. Enfrente, unos Grizzlies que sin Marc Gasol y Mike Conley no parece que puedan ser competitivos ante unos Spurs a los que ya tumbaron en eliminatorias en alguna temporada previa. Sin embargo, parece demasiado reto éste para el actual equipo de David Joerger, que bastante haría con ganar uno o dos partidos en la serie.
Oklahoma City Thunder (3) - Dallas Mavericks (6):
En los cuatro partidos que se enfrentaron este año, vencieron los Thunder, y no hay muchos motivos para pensar que no seguirá siendo así. No en vano, los de Oklahoma son sin duda el tercero en discordia tras los a priori inaccesible Warriors y Spurs. La sensación de que Kevin Durant podría hartarse de ser una estrella sin anillo, podría acrecentarse si nuevamente este año, en el que el sensacional alero acaba contrato, los Thunder no se asoman a la final. En esta primera serie, parecen claros favoritos ante unos Mavericks envejecidos y cuyas piernas no parecen ya suficientemente rápidas para oponerse a los Durant o Westbrook en tiempo de playoff. Demasiada carga parece para los de Carlisle.
Predicción: Thunder 4-1 Mavericks.
Los Ángeles Clippers (4) - Portland Trail Blazers (5):
Sensaciones enfrentadas también en esta serie, en la que los Clippers, claros favoritos en principio, llegan con más dudas que los de Oregon, la gran revelacion de la temporada en el Oeste. Por plantilla, no debería haber discusión en la superioridad californiana, pero los Clippers parecen una eterna fábrica de inestabilidad en el vestuario, muy marcada en este curso por Blake Griffin y su pelea con el responsable de material de la franquicia. Los de Doc Rivers deberían seguir el camino marcado por Chris Paul, un cerebro privilegiado dentro de un grupo lleno de gallos demasiado alterables. Y enfrente, los Blazers de Terry Stotts, que, lejos de hundirse por la salida de Aldridge y Batum en verano, han logrado elevar si cabe su rendimiento, con una temporada espectacular de Damian Lillard y, sobre todo, el descubrimiento de una de las revelaciones del curso: CJ McCollum. Un equipo sin nada que perder y con el suficiente descaro para dar algún susto a los Clippers, pero insuficiente a priori para eliminarles salvo descarrilamiento de los de Rivers.
Predicción: Clippers 4-2 Blazers.
Conferencia Este
Cleveland Cavaliers (1) - Indiana Pacers (8):
No parecen estos Pistons al nivel necesario para tumbar a la profundísima plantilla de Tyronn Lue, pero sin embargo los Cavaliers no terminan de dar la exigible sensación de solidez. Indiscutibles favoritos del Este por plantilla (y por LeBron James), los de Ohio siguen sin encontrar el baloncesto que les haga ganarse la confianza unánime de la crítica, más aún tras el sorprendente despido de David Blatt a mitad de temporada, sin aparentes motivos deportivos para ellos. En todo caso, que cayeran a las primeras de cambio sería una de las mayores sorpresas de la historia, y nadie lo espera, ante unos Pistons que vuelven a la pelea por el anillo tras varias temporadas lejos de ella, dando bandazos por la liga. La proximidad a la madurez de Andre Drummong, y la llegada de jóvenes valores como Reggie Jackson les ha abierto las puertas de los playoffs, pero no debería otorgarle opciones ante los Cavs.
Predicción: Cavaliers 4-1 Pistons.
Toronto Raptors (2) - Indiana Pacers (7):
Todo un soplo de aire fresco estos Raptors que llevan varias temporadas mejorando sus prestaciones, hasta convertirse en ésta en la gran alternativa de poder a los Cavs en el Este. Los canadienses llenan de orgullo a un país habitualmente deprimido en lo baloncestístico en los últimos años, a lomos de la espectacular pareja que forman Kyle Lowry y DeMar DeRozan. Sus dos exteriores ponen la velocidad y el frenesí en un juego de piernas jóvenes y frescas que les hace favoritos ante los Pacers, por más que en años previos los Raptors demostraran estar todavía verdes en las fechas en que se decide el título. Indiana, por su parte, no está al nivel de hace dos años, cuando coqueteó con ser el mejor equipo del Este, pero sólo el hecho de haber recuperado a un más que aceptable Paul George, tras su gravísima lesión (fractura abierta de tibia), ya es una noticia más que positiva para los Pacers, que podrían volver a crecer a su alrededor en próximas temporadas.
Predicción: Cavaliers 4-2 Pacers.
Miami Heat (3) - Charlotte Hornets (6):
Más que meritoria temporada la de ambos equipos. Los Heat, lejos de hundirse tras la salida de LeBron James hace dos años, han encontrado la forma de volver a codearse con los mejores de la liga. Con Dwayne Wade en buena forma física, Goran Dragic en su madurez como jugador, y el intimidador Hassan Whiteside como uno de los grandes descubrimientos de la liga en los últimos años, sólo la ausencia de Chris Bosh, con problemas de salud tras volver a sufrir un coágulo sanguíneo, les deja un poco cojos para aspirar a cotas mayores. Eso sí, no deberán confiarse ante unos Hornets en crecimiento en los últimos años, donde Kemba Walker se ha convertido en uno de los mejores bases de la liga, y en los que no hay más rutilantes estrellas pero sí un buen grupo joven capaz de hacer un baloncesto más efectivo que vistoso, pero suficiente para haber cuajado una gran liga regular.
Predicción: Heat 4-2 Hornets.
Atlanta Hawks (4) - Boston Celtics (5):
Fiabilidad y trabajo colectivo al poder. Tanto Mike Budenholzer como Brad Stevens se caracterizan por priorizar al grupo por encima de las individualidades. En Atlanta, tras su rutilante temporada pasada, no han mantenido el mismo nivel en este curso, pero son un equipo a tener en cuenta, con sus principales anotadores en la zona, Millsap y Horford, aunque sin dejar las fantásticas sensaciones de hace un año. Ojo con los Celtics, por los que nadie daba un duro en septiembre, pero que a base de un juego dinámico y coral se han hecho acreedores a ser la revelación del Este, logrando grandes gestas como ser el primer equipo en ganar a los Warriors en su cancha. La explosión del menudo Isaiah Thomas tiene buena parte de culpa en ello, pero si algo prima en la mentalidad de Brad Stevens, es el equipo. El `celtic pride´ (orgullo celta) ha vuelto a la NBA.
Predicción: Hawks 4-3 Celtics.