Tenis de quilates en las dos primeras mangas, en la tercera unas malditas taquicardias que sufrió Aliassime nos privaron del gran espectáculo -Auger se retiró con 4-1 en el tercer set-, y para el recuerdo quedará este espectacular revés a una mano de Shapovalov. Un golpe insólito que quedará en la retina de muchos amantes de la raqueta.
