LD (EFE) El Banco de Inglaterra justificó este recorte, el tercero desde el pasado diciembre, al señalar que tiene que buscar un equilibrio entre la contención de la inflación y el impulso de la economía. La decisión del MPC ya había sido prevista por los analistas, que incluso pronosticaron un recorte mayor, debido a los negativos datos macroeconómicos hechos públicos en los últimos días.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó ayer su previsión de crecimiento para la economía británica en 2008 hasta el 1,6 por ciento, frente al 2,3 por ciento pronosticado el pasado octubre. Asimismo, esta semana se conoció que el índice de confianza de los consumidores cayó en marzo a 77 puntos (frente a los 78 de febrero), su cifra más baja desde que se creó, en mayo de 2004. Además, el precio de la vivienda en el Reino Unido bajó en marzo un 2,5 por ciento, la mayor caída mensual desde 1992, según datos del Halifax, la mayor entidad hipotecaria que opera en el país.
Durante los últimos meses, el Banco de Inglaterra ha estado más preocupado por la contención de la inflación que por impulsar la economía a través de una mayor rebaja de los tipos de interés. La inflación interanual se situó en febrero en el 2,5 por ciento, tres décimas más que en enero y 5 décimas por encima del objetivo gubernamental (2 por ciento). Según algunos analistas, el incremento del precio del petróleo habría evitado un recorte aún mayor, ya que el Banco de Inglaterra teme que la inflación siga creciendo.
El Banco de Inglaterra rebajó los tipos en diciembre y febrero, en ambas ocasiones también en 0,25 puntos porcentuales, aunque estos recortes apenas tuvieron influencia en los tipos hipotecarios de los bancos británicos. En esta ocasión, sin embargo, las principales entidades financieras del país anunciaron tras conocer la medida que aplicarán de forma inmediata la rebaja de 0,25 puntos porcentuales a sus hipotecas con tipos variables.
El banco central británico está siguiendo una política de rebaja de tipos más gradual que la de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), que en enero recortó los tipos en un 1,25 puntos porcentuales y en marzo en otros 0,75 puntos, hasta el 2,25 por ciento. La rebaja de tipos en el Reino Unido reduce el diferencial con la zona euro, lo que afecta a la cotización de la libra, que se encuentra en mínimos históricos frente a la moneda única desde que ésta entró en funcionamiento, en 1999. Sin embargo, algunos analistas consideran que es probable que el recorte de hoy no afecte mucho a la cotización de la moneda británica, ya que el mercado ya lo había descontado.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó ayer su previsión de crecimiento para la economía británica en 2008 hasta el 1,6 por ciento, frente al 2,3 por ciento pronosticado el pasado octubre. Asimismo, esta semana se conoció que el índice de confianza de los consumidores cayó en marzo a 77 puntos (frente a los 78 de febrero), su cifra más baja desde que se creó, en mayo de 2004. Además, el precio de la vivienda en el Reino Unido bajó en marzo un 2,5 por ciento, la mayor caída mensual desde 1992, según datos del Halifax, la mayor entidad hipotecaria que opera en el país.
Durante los últimos meses, el Banco de Inglaterra ha estado más preocupado por la contención de la inflación que por impulsar la economía a través de una mayor rebaja de los tipos de interés. La inflación interanual se situó en febrero en el 2,5 por ciento, tres décimas más que en enero y 5 décimas por encima del objetivo gubernamental (2 por ciento). Según algunos analistas, el incremento del precio del petróleo habría evitado un recorte aún mayor, ya que el Banco de Inglaterra teme que la inflación siga creciendo.
El Banco de Inglaterra rebajó los tipos en diciembre y febrero, en ambas ocasiones también en 0,25 puntos porcentuales, aunque estos recortes apenas tuvieron influencia en los tipos hipotecarios de los bancos británicos. En esta ocasión, sin embargo, las principales entidades financieras del país anunciaron tras conocer la medida que aplicarán de forma inmediata la rebaja de 0,25 puntos porcentuales a sus hipotecas con tipos variables.
El banco central británico está siguiendo una política de rebaja de tipos más gradual que la de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), que en enero recortó los tipos en un 1,25 puntos porcentuales y en marzo en otros 0,75 puntos, hasta el 2,25 por ciento. La rebaja de tipos en el Reino Unido reduce el diferencial con la zona euro, lo que afecta a la cotización de la libra, que se encuentra en mínimos históricos frente a la moneda única desde que ésta entró en funcionamiento, en 1999. Sin embargo, algunos analistas consideran que es probable que el recorte de hoy no afecte mucho a la cotización de la moneda británica, ya que el mercado ya lo había descontado.