LD (EFE) Este incremento se produjo gracias al crecimiento de los resultados de las operaciones financieras y de sus participadas y a la reducción de los gastos de explotación (debido a los recortes de plantilla), que permitieron compensar los negativos efectos de la depreciación del dólar frente al euro y las devaluaciones de algunas divisas latinoamericanas.
De hecho, debido a estas depreciaciones y al entorno de bajos tipos de interés, el margen de explotación –resultado de la actividad puramente bancaria– disminuyó un 0,2 por ciento, hasta 13.775 millones de euros.
El margen de intermediación de la banca en España –la diferencia entre lo que las entidades ingresan por sus créditos y lo que pagan por sus depósitos– se redujo un 10,1 por ciento, hasta 19.661 millones de euros, debido a la caída de los tipos de interés y a la devaluación de las divisas. Sin embargo, las operaciones financieras registraron un notable aumento, del 53,4 por ciento, debido al "trading" -operaciones financieras y bursátiles a corto plazo– y a las operaciones de futuros realizadas por las entidades.
El resultado antes de impuestos se elevó a 10.436 millones de euros en 2003, lo que supuso un aumento del 16,1 por ciento, a pesar de las fuertes dotaciones realizadas por las entidades españolas para amortizar el fondo de comercio y de las dotaciones por el aumento del crédito. Además, el sector bancario español terminó 2003 con una morosidad del 0,83 por ciento, 13 centésimas menos que en 2002, lo que supone un nuevo mínimo histórico, que los responsables de la AEB calificaron de "magnífico".
Ante los positivos resultados obtenidos en 2003 y las mejores condiciones económicas actuales, la AEB espera nuevos incrementos de beneficios en 2004, a lo que ayudarán los aumentos de ingresos por comisiones y los mayores resultados extraordinarios por la previsible subida de la bolsa.
De hecho, debido a estas depreciaciones y al entorno de bajos tipos de interés, el margen de explotación –resultado de la actividad puramente bancaria– disminuyó un 0,2 por ciento, hasta 13.775 millones de euros.
El margen de intermediación de la banca en España –la diferencia entre lo que las entidades ingresan por sus créditos y lo que pagan por sus depósitos– se redujo un 10,1 por ciento, hasta 19.661 millones de euros, debido a la caída de los tipos de interés y a la devaluación de las divisas. Sin embargo, las operaciones financieras registraron un notable aumento, del 53,4 por ciento, debido al "trading" -operaciones financieras y bursátiles a corto plazo– y a las operaciones de futuros realizadas por las entidades.
El resultado antes de impuestos se elevó a 10.436 millones de euros en 2003, lo que supuso un aumento del 16,1 por ciento, a pesar de las fuertes dotaciones realizadas por las entidades españolas para amortizar el fondo de comercio y de las dotaciones por el aumento del crédito. Además, el sector bancario español terminó 2003 con una morosidad del 0,83 por ciento, 13 centésimas menos que en 2002, lo que supone un nuevo mínimo histórico, que los responsables de la AEB calificaron de "magnífico".
Ante los positivos resultados obtenidos en 2003 y las mejores condiciones económicas actuales, la AEB espera nuevos incrementos de beneficios en 2004, a lo que ayudarán los aumentos de ingresos por comisiones y los mayores resultados extraordinarios por la previsible subida de la bolsa.