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Un aficionado del Atlético es eximido de la mesa electoral

El abogado José Antonio Hernáez presentó un documento con ocho alegaciones. "Nadie con 43 años cambia de equipo de fútbol", dice.

José Antonio Hernáez, un abonado del Atlético de Madrid con entradas para la final de Champions que había sido designado como suplente en una mesa electoral para los comicios europeos del próximo domingo, ha sido eximido de su cargo tras presentar un recurso y las pruebas correspondientes a la Junta Electoral, según informa El Mundo.

Este abogado cuenta que la carta en la que se le informó de que había sido nombrado suplente en una mesa electoral le llegó un lunes, y que, por el número de abonado que tiene, "tenía cita para el miércoles si quería las entradas". Entonces llamó a la Junta Electoral de Madrid, se informó, y le contaron que había más casos de aficionados colchoneros que no querían estar en las mesas.

Entonces, Hernáez presentó un recurso con ocho alegaciones: "Nuestra intención, conforme lo dispuesto en el artículo 13 de la Declaración de los Derechos Humanos, y en concordancia con el artículo 19 de la Constitución y el Tratado de Schengen, es circular por el territorio nacional hasta Portugal, para llegar luego a Lisboa y regresar desde allí una vez finalice el encuentro de fútbol".

Continúa su alegato señalando que el partido puede finalizar a eso de las 23:30 y que teniendo en cuenta las posibles retenciones y atascos, podría llegar a Madrid a las siete de la mañana del domingo. "Como quiera que el artículo 12 de la Declaración de los Derechos Humanos -prosigue- impide la injerencia de los poderes públicos en mi vida privada, procede acordar mi excusa para garantizar tanto mis derechos individuales como el interés general".

Además, utiliza un argumento deportivo y sentimental: "Consideramos que también debe valorarse este acontecimiento como excepcional, toda vez que han pasado 40 años desde que el club disputó otra final análoga. En aquella época, con sólo tres años, no pude ir. En todo este tiempo he acudido a 36 bodas; algunos de los matrimonios ya han sido disueltos por divorcio. Nadie con 43 años cambia de equipo de fútbol. Si el legislador ha previsto las excusas por bodas de terceros, por analogía cabe en este caso, más excepcional e importante que el de ir a una boda".

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