El presidente del Parlamento de Andalucía, Manuel Gracia, consideraba que los autos de la juez Mercedes Alaya relativos al Parlamento andaluz pretendían culpabilizar a la Cámara autonómica. Y concluía que la juez se entrometía donde no debía aludiendo a la inmunidad parlamentaria y a su independencia respecto a los jueces. Ahora, el Consejo General del Poder Judicial -CGPJ- defiende el comportamiento de la juez.
Recoge la agencia Efe del comunicado del Consejo que tales autos, que pedían investigar el posible conocimiento de la Cámara de las partidas del caso de los ERE fraudulentos, no pretendían "en ningún caso, derivar responsabilidad al Parlamento Andaluz, a su Comisión de Economía o a alguno de los parlamentarios".
Gracia, que ha sido consejero de la Junta durante muchos años y finalmente presidente del Parlamento andaluz a propuesta de su propio partido con el apoyo de Izquierda Unida, remitió un escrito al Consejo en defensa de la inviolabilidad de la Cámara en el "ejercicio de sus funciones" tras los autos de 3 y 13 de marzo de 2014 de Alaya. Curiosamente, ahora ha calificado la respuesta obtenida como "satisfactoria" y "positiva".
En su queja, Gracia quería conocer el alcance de los autos de la juez, porque "parecía que se pretendía investigar al Parlamento, a una comisión o a los diputados, que, en principio, son inviolables, según el Estatuto de Autonomía".
En su escrito, el Consejo afirma que no han detectado anomalía o irregularidad por parte de la juez, por lo que rechazan adoptar ninguna medida respecto a ella, y el Parlamento precisa que nunca pidieron actuaciones disciplinarias para la magistrada.