A mitad de la semana en la que se presumía la firma en público de un acuerdo anticorrupción con el PSOE y a cuarenta y ocho horas de la segunda votación para investir a Susana Díaz presidenta de la Junta de Andalucía, Ciudadanos empieza a estar convencido de que repetirá el no dado el martes por Juan Marín. Aunque se mantienen los contactos con los socialistas, que está llevando a cabo Manuel Buzón, delegado territorial del Secretario de Organización, con su homólogo en el PSOE Juan Cornejo, las esperanzas de sellar un pacto se han reducido al mínimo. Así se lo trasladó el propio Buzón la misma tarde del martes, en un largo encuentro, a su jefe, Fran Hervías.
Si antes del debate Ciudadanos enfriaba el acuerdo, las últimas declaraciones de Albert Rivera, en una entrevista casi monográfica en Onda Cero, hacen descender esa temperatura hasta casi la congelación: "Hay un escollo, que es esa visión sobre los imputados en las listas, nosotros consideramos que no hay excepciones en función del apellido. Queremos que nos digan cuándo va a dejar Manuel Chaves su escaño. A cuarenta y ocho horas de la votación eso no se ha concretado". Rivera sigue apostando por la responsabilidad para dar estabilidad institucional "convocar elecciones cada tres meses no es la solución, ni para Andalucía, ni para España. No podemos ser Grecia ni Italia" pero le saca a Díaz sus garras dialécticas: "Yo no he convocado elecciones anticipadas, ha sido ella la que lo hizo para dar estabilidad, dijo, y no parece que haya mucha".
En el pacto anticorrupción que se había redactado entre los dos partidos, destacaba textualmente: "Los cargos públicos imputados por corrupción serán separados de su cargo". Fuentes de Ciudadanos son tajantes al respecto: "Entendemos que si son coherentes con el texto Chaves debe irse" e incluso muestran su hartazgo tras una semana de intensa negociación: "El PSOE ha incumplido muchos acuerdos con el Partido Andalucista e IU en su día. Nosotros somos nuevos, pero no novatos".
Ante esta situación, pese a la vía de comunicación abierta con el PSOE y pese al tono constructivo de Susana Díaz en su réplica a Juan Marín en el debate del martes, el no a la investidura parece ser el voto más probable el próximo viernes, salvo giro repentino en las horas previas al debate.