Ismael Moreno continúa con la investigación a los titiriteros. El juez de la Audiencia Nacional ha citado a cuatro espectadores de la obra para que declaren como testigos el próximo 16 de marzo. Acepta la solicitud de la Fiscalía, que interesó la llamada de estas personas porque presenciaron en directo "La bruja y Don Cristóbal" con motivo de los carnavales del barrio madrileño de Tetuán. El magistrado detecta indicios de enaltecimiento del terrorismo y un delito contra los derechos fundamentales porque Áfonso Lázaro y Raúl García habrían interpretado escenas violentas y exhibido una pancarta con la leyenda Viva Alka-ETA ante un público infantil.
Está previsto que los cuatro espectadores detallen el contenido de la obra. Según Ismael Moreno, incluyó escenas como una violación o un apuñalamiento. El juez ha reclamado también a las principales televisiones a nivel nacional -Atresmedia, Mediaset y TVE- y a Telemadrid que le remitan las imágenes del acto. Después de permanecer cinco días encarcelados, los titiriteros se encuentran en libertad con la obligación de comparecer a diario en los Juzgados más próximos a su domicilio y sin poder abandonar España.
Pokemon y Gormiti
Los abogados de los dos imputados formuló la petición de archivo de la causa al juez. Sin embargo, Moreno no decidirá hasta culminar estas diligencias. En el escrito de defensa, los representantes de los titiriteros argumentaron que sus clientes encuentran amparo en el derecho a la creación artística. Según el documento, dibujos animados para menores como 'Pokemon', 'Gormiti' o 'Tom y Jerry', contienen escenas más "violentas y explícitas".
Para los abogados, produce "estupor y hasta sonrojo" que se investigue a unos "artistas" porque en su obra "una marioneta que representaba a una bruja pegaba cachiporrazos a un agresor sexual o apuñalaba a una monja que le robaba el hijo fruto de esa violación". En el agravio comparativo, sostienen que el Tribunal Supremo absolvió a cuatro neonazis que manifestaron enunciados "antisemitas, racistas, negacionistas" y guardaban en la librería Kalki multitud de obras filonazis, entre ellas 'Mi lucha' de Adolf Hitler.
"Pretender que se encause a nuestros representados porque en su obra de ficción se banaliza con el uso de la violencia presentándola como algo habitual o normal por parte de algunos sectores de la sociedad supone, con todos los respetos, desconocer la sociedad en la que se vive, en la que existen dibujos animados como Pokemon o Gormiti, estos sí dirigidos específicamente a menores, en los que existen muchas más escenas de violencia y más explícitas que las cuatro escenas investigadas".