"El Partido Popular, el PSOE y Ciudadanos, en este momento, no tienen proyecto de país. No tienen en la cabeza nada diferente a lo que signifique resistir. Resistir a Podemos, resistir al desafío secesionista catalán, utilizar la Constitución como una suerte de elemento de atrincheramiento. Resistir a las movilizaciones sociales con la Ley Mordaza", así lo cree Pablo Iglesias que este martes en un acto en Madrid aseguró que él es el único líder de los cuatro principales partidos en España que tiene un "proyecto para España", pero que la "trama" no le permitió gobernar para aplicarlo.
"Cuando decimos que es necesario hablar de un plan de transición energética, estamos hablando del futuro de nuestra patria. Cuando decimos que España es una realidad política plurinacional frente al inmovilismo del búnker, estamos diciendo que tenemos un proyecto de España", explicó durante su intervención en la presentación del libro "Ibex 35, una historia herética del poder en España".
En un acto que tuvo lugar en el Teatro del Barrio de Madrid, lugar en el que en 2014 presentaron Podemos como partido político, Iglesias acuñó el término "trama" para definir lo que antes llamaba "casta". Es decir, "una red de intereses" en la que incluye desde las empresa del Ibex 35 a la infanta Cristina o a los partidos políticos, que no le permitieron gobernar. "En 2016, la trama actuó básicamente para que Podemos no pudiera hacer leyes y eso implicaba que no estuviéramos en el Gobierno". "La gente humilde no puede cambiar las cosas con dinero, lo puede hacer con la ley. Para eso, hay que ganar unas elecciones y en eso estamos", afirmó.
"Fantasía"
Según el líder de Podemos "la crisis de régimen avanza en términos históricos. El gobierno dice que se está volviendo a la normalidad. Eso es una suerte de fantasía y una especie de nostalgia con respecto a un pasado que no va a volver".
Una crisis que, según Iglesias, se refleja en el libro que presentaba de Rubén Juste. Un texto que ha sido promocionado por los dirigentes de Podemos en Twitter. Algunos como Irene Montero incluso metieron la pata al referirse a él confundiendo términos económicos.