Irene Montero ha descartado este martes que su futura paternidad junto con Pablo Iglesias pueda suponer un problema en el liderazgo de Podemos. Preguntada por este asunto en una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, la dirigente morada, embarazada de mellizos, ha asegurado que este tipo de cuestiones tan solo demuestran "lo importante que es en este país" que Podemos "legisle de forma urgente para garantizar que los permisos de paternidad y maternidad iguales, intransferibles y cien por cien remunerados, para que ustedes no tengan que hacerme esa pregunta y para que a nadie se le ocurra tener que vincular un embarazo de una persona a una posible crisis de liderazgo o a un posible problema laboral".
Montero, que ha continuado su diatriba afirmando que "el mero hecho de que me hagan esta pregunta me refuerza en el compromiso de mi grupo parlamentario y en el mío personal, ahora si cabe con con más motivos de los que ya tenía antes, para que legislemos pronto", ha destacado que cree necesario "reorganizar el sistema de cuidados, la relación del sistema reproductivo y de la economía reproductiva con la economía productiva para que a nadie nunca le tengan que hacer esa pregunta o tengan que vincular esos dos hechos para que la vida sea sostenible y digna de ser vivida, que es lo que queremos para todas las españolas y es por lo que peleamos cada día en el Congreso".
La portavoz de Unidos Podemos anunció el pasado sábado que esperaba dos hijos junto a Pablo Iglesias. Unos bebés que nacerán el próximo septiembre y que dejarán al partido morado sin dos de sus caras más visibles durante unas semanas.
Desde la formación de los círculos destacan que este hecho no se convertirá en un problema dado que tienen "otros portavoces autorizados" dentro del partido y también en sus confluencias gallega y catalana, En Marea En Comú Podem.