El mundo de la empresa es cada vez más competitivo y exige la máxima preparación. No basta con tener un espíritu emprendedor y mentalidad de negocio; es preciso adquirir conocimientos y dotarse de unas herramientas que permitan encarar el futuro con garantías.
Esa formación suele adquirirse en la universidad, pero también conviene abonar el terreno con una preparación previa. En este sentido, están cobrando peso los programas de pregrado, que preparan a los estudiantes para potenciar sus aptitudes y habilidades empresariales y encarar la formación universitaria pensando en el futuro desde el primer momento.
Se trata de cursos, por lo general breves y de contenido muy específico, enfocados en competencias laborales. Pueden ser muy útiles si necesitamos ayuda para orientar nuestra formación o queremos centrarnos desde el principio en la aplicación práctica de los conocimientos que queremos adquirir.
Babson Build for Santander Universities Students
Diversas instituciones están poniendo el foco en esta etapa con programas de apoyo. Es el caso de Banco Santander, que, a través de su área Santander Universidades, impulsa un programa de becas en el extranjero destinado a los alumnos de pregrado con talento y vocación empresarial. Los estudios se realizan en el prestigio Babson College de Wellesley, en Massachussets, un referente en emprendimiento y administración de empresas.
La última edición, celebrada el pasado verano, concedió 30 becas de formación para la participación en un programa académico de una semana. Las ayudas incluían alojamiento en el Campus Babson en habitación compartida con otros becados, manutención, sesiones de estudio con profesorado especializado y un certificado de participación.
El temario se centró estrictamente en la creación y potenciación de las habilidades empresariales, con asignaturas como Pensamiento y Acción Empresarial, Análisis de Mercado, Liderazgo Empresarial, Marketing Digital o habilidades de negociación, e incluía prácticas empresarias reales y simuladores de negocio.
Para participar en la experiencia, los aspirantes debían estar matriculados en alguna de las más de 1.200 universidades de 21 países que forman parte de la red de colaboración universitaria que mantiene Banco Santander en todo el mundo. Solo en España, la entidad presidida por Ana Botín colabora con 84 universidades e instituciones académicas. Además, debían acreditar un buen nivel de inglés tanto oral como escrito para aprovechar al máximo el curso.
Por un lado, con esta beca los participantes pudieron formar parte de un centro de referencia. El Babson College, que alcanza su centenario este año, está especializado en administración de empresas y considerado una de las mejores escuelas universitarias en esta especialidad. Por otro, los estudiantes tuvieron la oportunidad de hacer networking y establecer contactos con alumnos de todo el mundo dentro y fuera de las clases. El alumnado del Babson College procede de países y culturas muy distintas, lo que permite ampliar horizontes, intercambiar experiencias y analizar las situaciones desde diferentes perspectivas. Además, está cerca de las ciudades de Boston y Cambridge, que albergan centros universitarios de primer nivel. Eso permite a los alumnos acercarse a un ambiente estudiantil rico, inspirador y diverso.
Ese es uno de los aspectos que más destacan los participantes. Uno de ellos fue Alejandro Linde, estudiante de la Universidad Miguel Hernández, un ilicitano con un extenso currículum que ahora cursa un máster en Administración de Empresas y que buscaba en Babson "conocer las universidades americanas y ver cómo se abordan allí los modelos de negocio y el desarrollo de startups". Su objetivo era "ver la diferencia entre la metodología de estudios española y americana", agrega Linde.
La "neurona" que impulsa a emprender
Alejandro Linde, receptor de una de las Becas Santander, es el creador de una aplicación móvil que optimiza rutas turísticas y que encontró en la Universidad una metodología mucho más enfocada "en la práctica, y es fabuloso". También subraya cómo ganó contactos y cómo aprovechó unas instalaciones "increíbles": "Repetiría mil veces", remarca. En cuanto al objetivo del programa, alcanzar una mentalidad empresarial, Linde subraya que con el curso creció su motivación para aprender: "Sales con ganas de seguir emprendiendo, de seguir mejorando tu proyecto. De alguna manera, se activa esa neurona y esa fuerza especial que nos impulsa a emprender".
Como ejemplo pone el pitch de tres minutos que celebraron el último día del curso en el que cada uno de los alumnos presentó sus proyectos: "Fue muy enriquecedor". La experiencia, cuenta, les ayudó a "crear feedback, ver los fallos que cometes y aprender de ellos".
El Babson imparte clases de pregrado y posgrado y durante 19 años consecutivos, el Máster en Administración de Negocios de Basbon ha encabezado el ranking que elabora anualmente la revista U.S. News & World Report. Un prestigio del que seguirán beneficiándose muchos alumnos que quieren situar el emprendimiento como objetivo desde el primer día.