Para Albert Rivera, lo sucedido entre el ministro Josep Borrell y ERC el miércoles en el Congreso demuestra que a Pedro Sánchez "se le ha ido el Gobierno Frankenstein de la las manos". Así lo ha asegurado este jueves en una rueda de prensa convocada en la cámara baja, donde el líder de Ciudadanos insistía de nuevo en su propuesta de una reforma electoral para fijar un 3% mínimo a nivel nacional para obtener representación parlamentaria, algo que, calcula, dejaría fuera del Parlamento a los nacionalistas, evitando de paso "que Rufián humille a los españoles".
Igualmente, Rivera criticaba la "equidistancia" del presidente del Gobierno al culpar por igual al diputado deERC expulsado del pleno el miércoles y a Pablo Casado del clima de crispación política. En todo momento, el líder naranja mostraba su sorpresa y estupor porque los dirigentes del PSOE hayan dudado de la versión de Borrell sobre el "escupitajo" de un diputado separatista, dejando así al ministro de Exteriores "colgado de la brocha".
En síntesis, Rivera acusaba a Sánchez de estar "más cómodo con los que escupen a un ministro de España que con los que defendemos y aplaudimos a un ministro del Gobierno de España". Una actitud que, a su juicio, se explica porque al jefe del Ejecutivo "le da igual todo, y cuando digo todo, es todo. Es capaz de cualquier cosa, por seguir en La Moncloa unos meses, por seguir cogiendo el helicóptero y el avión, de todo, y eso es lo preocupante de este presidente. Un mínimo de dignidad uno tiene que tener, una cosa es ser flexible y otra cosa es no tener moral, no tener límites, y este Gobierno está superando muchos límites".
Preguntado por si daba por bueno el salivazo, Rivera ironizaba tirando de símiles deportivos: "Yo no tengo VAR, ni ojo de halcón, ni lo pretendo. Me parece un debate, con todos los respetos, simbólico. Yo lo que siento es que estos señores, de manera figurada o de manera física, escupen cada día sobre nuestra Constitución. Estos señores, ERC, queman constituciones el día de la Constitución, defienden a los comandos separatistas en Cataluña y les dicen que ‘adelante, seguid calentando’, les dice Torra. ¿Qué más hace falta para darnos cuenta que el separatismo es el problema más grande que tiene España hoy?" se preguntaba Rivera, quien señalaba además que Sánchez, en lugar de combatir ese problema "política e intelectualmente" lo que hace es "acostarse con él".