En su intervención en la sesión del debate de investidura del candidato Pere Aragonès, el líder del PPC, Alejandro Fernández, ha lamentado que "Cataluña esté igual que hace seis años, en manos de la CUP" y que se siga sufriendo una "degradación de la economía y la convivencia".
Pero el momento más brillante de su intervención ha llegado al dirigirse a la presidenta del Parlamento catalán, Laura Borràs, a quien ha calificado de "agente doble de la guerra fría". "Es una crack porque es capaz de llamar opresor al Estado español y luego convertirse en flamante funcionaria de ese mismo Estado" esta misma semana. "Es una crack. Me pongo a sus pies", ha dicho con sorna.
Aludía al hecho de que Borràs ha conseguido una plaza de funcionaria del Estado como profesora de Universidad. "Hay que ser un auténtico crack para llamar fascista al Estado a la vez que se acepta una plaza de funcionario y un sueldo vitalicio", ha insistido Fernández, quien también resaltó lo poco y mal que oprime ese Estado del que es funcionaria Borràs.