
El Mundo
"El tesorero del PSOE valenciano amañó contratos en la etapa de Ximo Puig: "Ya he hablado con el jefe"". ¿Y eso es corrupción de la mala o de la buena, según el nuevo criterio del PSOE?
"El PSOE y el PP sacan rédito de la batalla por el TC: de la "agitación progresista" al se verá la agenda "tóxica"". Dice Lucía Méndez que "tan acostumbrados estamos en la tribuna del Congreso a escuchar burradas, una tras otra, que el Sánchez-Feijóo de este miércoles sonó a cierto sosiego". Un peñazo. "Sánchez como Feijóo dan la impresión de buscar una rebaja de la tensión ambiental". Bueno, Sánchez quería guerra, pero es que es muy difícil alterar a Feijóo. Lucía está encantada con el gallego. "De todos los cara a cara que se han celebrado en este año, este último ha sido sin duda el mejor para Alberto Núñez Feijóo". Lo tenía fácil, todo hay que decirlo. "Ha ganado en seguridad, en aplomo, en puntería y en eficacia". Tal vez no le sobrarían unas clases de oratoria para eliminar esos balbuceos.
"Feijóo aprovechó para meter el dedo en la llaga de la falta de credibilidad de Pedro Sánchez, para instalar en el imaginario social que el presidente del Gobierno es muy capaz de autorizar un referéndum de autodeterminación en Cataluña". Lucía, que Pedro Sánchez es un embustero patológico lo sabe todo el mundo desde mucho antes de que aterrizara Feijóo en Madrid.
"Feijóo parece haberle tomado la medida a Sánchez, después de todo, y de unos meses de aterrizaje algo convulso. Por lo menos, en el Senado. Falta un año para las elecciones". Con Sánchez no se puede bajar la guardia, es una apisonadora. Y si en una semana ha estado a punto de cargarse el Poder Judicial, en un año puede pasar cualquier cosa. Y más aún con su artillería mediática.
Leyre Iglesias se teme que esta Nochebuena será como una sesión del Congreso en los hogares españoles. "Prepárense para las comidas navideñas, con la mitad de la mesa llamando golpista a la otra. ¡Sabotaje, secuestro, atropello!". Recomendamos ser comedidos con el cava.
"La serenidad del presidente consiste en acusar a las derechas, incluidos sus medios y sus togas, de urdir un complot contra él". Le ha dado fuerte, sí. Lo mismo obliga a Bolaños a probar sus comidas por si están envenenadas. Está paranoico perdido.
"Si algo define a Pedro Sánchez es la persistencia en lograr sus fines. Por el camino se deteriora todo. También la convivencia". "Hace bien el Gobierno. Qué otra cosa le queda si medio país está conspirando para destruirlo". "Ahora son los jueces, pero hace nada los enemigos del pueblo eran los empresarios. Qué decir de los periodistas". Bueno, los periodistas que no están a su servicio. Sánchez ha divido España entre buenos, que son los etarras, los golpistas y los violentos de extrema izquierda, y los malos, que son todos los que no le bailan el agua. Y que resulta que es más de media España.
Arcadi Espada señala los medios golpistas. "¿Qué dijo la otra noche el Tribunal Constitucional? Escuetamente, que el procedimiento parlamentario utilizado por el Gobierno y su mayoría era incorrecto. Ni prohibió el debate ni la capacidad del legislador para modificar el sistema de elección de los miembros del tribunal. Y sí, protegió los derechos -y la obligación- de los diputados; y el principal, y tan desusado, que es votar con pleno conocimiento de causa. Antes y después de esa decisión la izquierda política y mediática organizaron una despreciable campaña de propaganda que tuvo en el diario El País y la Cadena Ser sus más graves voceros". Los medios de Prisa son una auténtica cloaca.
"Los modos del presidente del Gobierno ya no se distinguen de los del populismo más soez y es probable que tengan éxito. Es cierto que ha perdido cualquier respeto por la inteligencia y la integridad moral de sus votantes. Pero, como buen populista, cuenta con la baza del dudoso respeto que habrán de tener por sí mismos los que le voten". Puede. Pero también hay que contar con otro fenómeno. Precisamente por sus modos de gobernar, la gente ya no solo le odia, le está cogiendo miedo.
Eduardo Álvarez compadece al Rey. No es el único. "Pues sí que le han armado la marimorena al Rey. No es difícil imaginar a la guardia pretoriana de Don Felipe estas últimas horas llenando las papeleras de Zarzuela de folios hechos bolas de desecho con párrafos del borrador de su discurso de Navidad. Mala suerte ha tenido hasta ahora el que por prudencia, capacidades y personalidad se está demostrando como un excelente monarca parlamentario. Pero le han tocado tiempos demasiado difíciles para reinar". Debería mandarnos a todos a freír espárragos.
"Don Felipe se encuentra ante el marronazo, una Nochebuena más, de pronunciar un discurso que difícilmente no dejará más helados que un témpano a casi todos porque la polarización tan extrema y el despiporre institucional que aquejan hoy a España son incompatibles con las tautologías regias y las elevadas frases de a buen entendedor". "Quizá este año lo único eficaz fuera que Don Felipe felicitara las fiestas a los españoles y rompiera ante las cámaras su discurso sin leerlo, dando paso a Los Morancos o a quien sea". Y que se largara dando un portazo. Váyanse todos a hacer puñetas, nunca mejor dicho.
El País
"El Constitucional rechaza dividido los recursos de la Fiscalía y las dos Cámaras", titula el periódico del golpe. ¿De quién depende la Fiscalía? Pues eso. José María Brunet insiste en el disparate de que el Poder Judicial se supedite al Parlamento. "Entre estas solicitudes figuraba que se pudiera reanudar el trámite legislativo sin alterar la voluntad mayoritaria de las cámaras". ¿Y si la voluntad mayoritaria de las cámaras decide matar a todos los gitanos o retirar el voto a las mujeres?, como dice Raúl Vilas en un brillante artículo. "El Gobierno y sus socios debaten registrar la nueva reforma del Constitucional tras conocer el fallo del tribunal". "En el Gobierno hay prisa, y cierto ánimo de revancha, para corregir cuanto antes el varapalo y el toque de atención recibido desde el Constitucional". Y avalado por Bruselas, que curiosamente es algo que el diario golpista no menciona, con lo que les gusta a ellos ampararse en Europa cuando les conviene. No se entiende a qué vienen tantas prisas. ¿Esta es la serenidad de la que hablaba Pedro Sánchez?
"Sánchez acusa a Feijóo de "enmudecer a las Cortes" y este le exige que "vuelva a la Constitución"". No es que el titular sea aburrido, es que el debate lo fue. Tal vez porque, como dice Lucía Méndez, estamos acostumbrados a los plenos a bofetada limpia del Congreso. "Según Pedro Sánchez, toda la responsabilidad corresponde a Alberto Núñez Feijóo, cuya aportación tras nueve meses al frente del PP se reduce a "enmudecer a las Cortes". Y, en la perspectiva de Feijóo, no hay otro culpable que Sánchez, a quien el líder del PP exigió que "vuelva a la Constitución" dejando en el aire el sobreentendido de que el presidente del Gobierno se ha situado fuera de ella". Vaya si lo ha hecho, y con auténtico frenesí. Lo que se llama la fe del converso.
"Los populares han retornado a la guerra sin cuartel contra el Gobierno, a cuestionar incluso su legitimidad y a vapulearlo con un tema único como arma arrojadiza: los pactos con los independentistas". A ver, Casqueiro, la guerra sin cuartel se ha declarado el Gobierno a todos los españoles que no sean independentistas, al Poder Judicial, a la prensa independiente, es decir, todo lo contrario que Casqueiro, Pepa Bueno, Carlos Cué, Ferreras y todo ese ejército de periodistas que sirven a Sánchez sin rubor. El PP nunca ha cuestionado la legitimidad de Sánchez, no se entiende por qué, pero no lo ha hecho. Lo ha hecho Vox y lo hacen aquellos que votaron a Sánchez creyéndose sus promesas en campaña. No podría dormir con Podemos, no dejaría nunca que el Gobierno dependiera de los separatistas, jamás, jamás pactaría con Bildu y toda la retahíla de embustes de los que da fe la hemeroteca.
"Feijóo esconde su victoria en el Constitucional", dice Elsa García de Blas. "El silencio del líder del PP sobre la inédita decisión del Constitucional es elocuente. Habla de las dudas que recorren al PP sobre los beneficios para el partido de lo que ha sucedido, más allá de haber logrado doblar el brazo al Gobierno en el corto plazo. Existe el temor de que la situación se haya ido de madre". Se ha ido de madre por la sobreactuación de un Sánchez amenazador, fuera de sí, con su maquinaria mediática a todo trapo. "Los populares tienen dudas sobre los réditos de una estrategia que ha tensionado al máximo la discusión política y que también ha logrado movilizar a la izquierda". La izquierda sanchista siempre está movilizada.
Según Estefanía Molina, "la derecha tenía un plan, pero tras unir a la izquierda, indignar a su votante, y darle un relato electoral, la jugada aún podría salir mal". Es fácil de comprobarlo. Que Sánchez ponga las urnas ahora que ya todo el mundo sabe cuál es su programa y quiénes son sus socios. Ahora que ya no engaña a nadie. Y si la gente vota a un embustero patológico, a un traidor, a un psicópata, pues tendremos lo que merecemos. Pero que no se escuden en las urnas. Nadie votó lo que ha hecho Sánchez.
ABC
"El nuevo modelo universitario se somete a las demandas nacionalistas". Pues lógico, son los nacionalistas quienes mandan en España. "Sánchez se enroca en sus ataques al Constitucional y Feijóo reclama elecciones". Sánchez está desafiando ya hasta a la Unión Europea, el tío está fuera de sí. "¿Cómo van a seguir las coles de Bruselas con la matraca de las 'iliberales' Polonia y Hungría estando ahí, con los socialistas (je), al mayor dictador 'wannabe' de las últimas décadas? Comodín: Úrsula puede aceptarlo casi todo, pero no todo. Tiene debilidad por Sánchez y sobre gustos no hay nada escrito. Pero con la morterada de los fondos europeos, poca broma", dice Girauta. Ya están tardando Polonia y Hungría en reclamar para España las sanciones que les han impuesto a ellos.
Berta González de Vega también está preocupada por la Nochebuena. "Me los he imaginado. A Pedro Sánchez y a Pablo Iglesias, sonriendo satisfechos, sabiendo que este sábado, Nochebuena, en miles de familias va a haber movida". "No se lo permitan. No se merecen arruinar la noche más familiar del año en ninguna casa". "Nos quieren cenizos, cabreados, angustiados, con miedo. Con ganas de pelea. Perdiendo energías en batallas inútiles, como la que se puede iniciar en una cena de Nochebuena". "No lo permitan", insiste Berna.
"Que no se trata de poner la otra mejilla, como trató de enseñarnos el niño cuyo nacimiento celebramos el sábado. Tampoco es eso. Que ya se lo devolveremos cuando nos toque votar. La única batalla útil. Mientras, no les den el gustazo". Firmo, esta Nochebuena prohibido hablar de política. Si le provoca su cuñado, hágase el loco. Hablaremos en las urnas.
La Razón
"El Gobierno lanza un plan de ataques personales contra Feijóo". Como si el Gobierno hubiera hecho otra cosa desde que llegó el gallego a Madrid que lanzar ataques contra él. "El discurso del presidente del Gobierno delimita el marco de la operación para levantar un nuevo cordón sanitario contra el PP. El PSOE ha asimilado hasta tal punto el discurso y las alianzas con sus socios de investidura que les «compra» también el mensaje que deslegitima al principal partido de la oposición como actor democrático. Y esto facilita a la izquierda el objetivo estratégico de ir sembrando el caldo de cultivo para que la contienda electoral de este año se presente en términos plebiscitarios: los supuestos herederos del franquismo, y ahí meten al PP, contra el nuevo frente popular, que formarían el PSOE, las marcas de la izquierda y sus socios independentistas y nacionalistas. Desde este enfoque de dos bloques, en el que uno no reconoce legitimidad al otro, los puentes entre el Gobierno y la oposición no quedan dañados de mantera temporal, sino de forma permanente en tanto no se produzca un fracaso del «sanchismo» en las urnas que obligue al PSOE a revisar su estrategia e incluso a valorar la posibilidad de cambiar también de liderazgo", cuenta Carmen Morodo. Pues eso, eso, urnas cuanto antes mejor.
"La imagen que ayer dejó el Senado es fiel reflejo de lo que traerá 2023. Sánchez echó más leña al fuego sin responder a las preguntas de Feijóo sobre la consulta, la derogación de la sedición y la rebaja de la malversación. El líder socialista sí jaleó supuestos insultos de Feijóo que no se escucharon y actuó más como oposición de la oposición que como presidente del Gobierno". Sánchez es un hooligan, un matón de barra de bar, un mentiroso que está convencido de que la gente es idiota.
Marhuenda opina que "hay que tener en cuenta que la actual crisis institucional es un «festín» electoral para Sánchez". "La izquierda mediática lleva varios días volcada en la descalificación de Pedro González-Trevijano y Enrique Arnaldo. Por supuesto, Feijóo es la encarnación de un ser diabólico". Pues hay que estar muy mal de la cabeza para ver en Feijóo un ser diabólico. No inspira ningún temor, al contrario, es la viva imagen de la templanza. Al contrario que Sánchez. Pero claro, Marhuenda sabe mucho de izquierda mediática, su empresa es la propietaria de la cadena más incendiaria que se ha visto nunca en España y paga al periodista más sectario de la historia, Antonio García Ferreras. Por algo se llama su programa Al rojo vivo, como anillo al dedo.
"La visión de Sánchez se reduce a «¡Más madera, que es la guerra! ¡Ni heridos ni prisioneros! ¡Zafarrancho de combate y el último que cierre la puerta, que hay corriente!»". Pues nada, a la guerra, pero si no le importa al presidente, que sea en las urnas, porque al paso que lleva va a empujar a los ciudadanos a pasar a las manos. Y a ver cómo controla eso.






