El caso Tito Berni ya ha llegado a la Comunidad Valenciana. La investigación ya ha comprobado que el Ayuntamiento de Valencia que gobierna Joan Ribó (Compromís) en coalición con el PSOE firmó contratos con empresas de la trama del también denominado caso Mediador. El departamento encargado del cierre de estos contratos fue el área de Policía y Bomberos del consistorio de la capital valenciana. Ese área está dirigida por el socialista Aarón Cano. El contrato fue a dedo con una de las empresas de drones vinculadas a la trama y se centró en los años 2021 y 2022. Y esta misma persona, Aarón Cano es uno de los vocales de la fundación de cabecera de José Luis Ábalos, como prueban los documentos que hoy publica Libertad Digital. Esa fundación, de nombre Fiadelso, además, contó con el impulso inicial de José Luis Vera, uno de los dos cabecillas de otra trama de presunta corrupción, el caso Azud.
Los contratos firmados por el Ayuntamiento de Valencia y en el departamento del socialista Aarón Cano fueron tres y suman más de 17.000 euros, según fuentes del PP de Valencia. La delegación de Policía y Bomberos firmó la compra de drones, baterías y hélices en tres pedidos diferentes: el primero de ellos supuso un gasto de 14.025 euros y su objeto fue la adquisición de dos drones. El importe del segundo ascendió a 2.299 euros y el tercero de 1.161 euros.
Desde el PP remarcan que los contratos fueron firmados por debajo de los importes que permiten la adjudicación a dedo y que ello apunta a una entrada deliberada del "conseguidor socialista" en el Ayuntamiento valenciano. La candidata del PP a la Alcaldía de Valencia, María José Catalá, no ha dudado en afirmar ya que "el PSOE ha ocultado estos contratos ya que no han sido incluidos en la plataforma de contratación del Estado como prevé la ley".
Pero Aarón Cano no es un cualquiera ni en la Comunidad Valenciana ni en el PSOE valenciano. La documentación en poder de Libertad Digital refleja como el pasado 7 de octubre de 2019 y 21 de febrero de 2020 -es decir, un año antes de la firma de los contratos de compra de los drones relacionados con la trama del Tito Berni- hubo un hecho delator de la relación de Aarón Cano con una de las personas en ese momento de máxima confianza de Pedro Sánchez y que, además, formaba parte del Gobierno con rango de ministro: José Luis Abalos.
Ábalos siempre ha tenido una fundación como referencia. Se trata de Fiadelso. El ex ministro ha llegado a tener tal implicación con esta entidad que hasta la sede de la fundación fue copropiedad de Ábalos. Pues bien, en esa documentación se recoge el nombramiento de Aarón Cano como vocal de Fiadelso y miembro del patronato de la Fundación. Los documentos fueron registrados en el Departamento de Justicia de la Generalidad Valenciana de Ximo Puig.
Esa fundación recuperó, además, protagonismo a raíz de las informaciones de otra trama de presunta corrupción socialista. El caso Azud. La Guardia Civil ha identificado a dos cabecillas de la trama Azud de presunta financiación ilegal del PSOE en la Comunidad Valenciana. Uno de ellos es José María Cataluña, el que fuera tesorero del partido. El otro es José Luis Vera, enlace con la empresa pública Acuamed, sociedad a la que la Benemérita apunta como pagadora final de los desembolsos de los que se beneficiaba el PSOE. Y Vera, además, siempre mantuvo una fuerte relación por medio de Fiadelso con el exministro socialista José Luis Ábalos. Vera fue, de hecho, uno de los fundadores de Fiadelso, la fundación de cabecera de Ábalos y con la que el exministro de Pedro Sánchez y figura central del archivado caso Delcy Rodríguez realizó viajes e intervenciones en el extranjero.
Ábalos, además, llegó a ser copropietario de la sede de Fiadelso. Y esta fundación contó con clara ayuda pública: logró casi siete millones en subvenciones de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y de feudos territoriales del PSOE.
FIADELSO recibió 407.377,36 euros en subvenciones en 2004, 557.464,69 euros en 2005, 707.703,08 euros en 2006, otros 700.224,15 en 2007, 1.384.734,16 euros en el muy electoral año 2008, 1.121.811,69 euros en 2009, 638.318,17 euros en 2010, 279.620,83 euros en 2011, 23.744,84 euros en 2012, otros 23.744,84 euros en 2013 y, de nuevo, los mismos 23.744,84 euros en 2014. En total 5,86 millones de euros en esta partida de subvenciones públicas.
Pero ha habido más pagadores. Desde la Secretaría Autonómica de Transparencia, Responsabilidad Social, Participación y Cooperación y con fines como la "sensibilización de 2.000 niños y niñas valencianos sobre el Derecho Humano a unas condiciones laborales dignas, una erradicación del trabajo infantil y el derecho universal de los niños a una educación e infancia digna, la preservación del medio ambiente mediante unas prácticas productivas y de mercado éticas con el planeta". Hasta municipios con fines más concretos.
Y hay otra partida que ha supuesto también importantes ingresos para la fundación que siempre tuvo como referencia José Luis Ábalos y que contó con Vera como socio fundador. La correspondiente a la Agencia de Cooperacion y Desarrollo, AECID. Desde allí salieron ayudas, por ejemplo, impulsar la "mejora del acceso y la calidad del sector educativo en Tacobamba, Departamento de Potosí, Bolivia". O para crear el "programa de la mujer indígena del Cauca". O para conseguir "frutos para la paz a través del comercio justo para campesinos e indígenas".
La labor de apoyo financiero de AECID, además, fue previa a la llegada del resto de subvenciones mencionadas. Ya en 1995, la Agencia Pública dependiente del Gobierno español decidió pagar dos proyectos en Bolivia y Colombia por valor de 41.872,51 euros y 108.182,18 euros respectivamente. En 1996 las ayudas se centraron en Ecuador, Paraguay y Perú, con importes individuales de casi 200.000 euros (197.835,15 euros). En 1997 el riego de dinero continuó, llegando alguna de las subvenciones a los 285.342,52, por ejemplo, en el caso de la subvención diseñada para lograr la "disminución de la mortalidad materna e infantil en la zona marginal de ciudad de Quito". Y 1998 no fue una excepción. Uno de los proyectos, de ese mismo 1998, se centró en la mejora de las "infraestructuras educativas en el departamento de Ancash" por un importe de 85.409,83 euros.
En total, procedente de esta fuente -AECID-, la suma en esos años comprendidos entre 1995 y 1998 alcanza los 903.501 euros. Lo que eleva el cómputo total de subvenciones de Fiadelso a casi siete millones de euros (6,77 millones). La AECID, integrada en los esquemas de cooperación internacional del Gobierno de España comparte objetivos con otra fundación, la Fundación Internacional Iberoamericana. Esta segunda fundación ha empezado ya a ser chequeada por la Guardia Civil por una serie de contratos vinculados a la trama del Tito Berni.