
El Mundo
"La citación a Sánchez sacude al PSOE: "Esto se complica". Y dejan claro que van a por el juez. "«Es una persecución política despiadada contra el presidente y su familia en la que nadie disimula nada», sentenció Félix Bolaños, ministro de la Presidencia y de Justicia". Cuando citaron a Rajoy nadie hablo de persecución ni de operación política del juez. Pero claro, es el PSOE que tiene licencia para delinquir, ya lo hemos visto con los ERE.
Según el editorial, "es lógico que el juez trate de averiguar el impacto de la influencia de la autoridad del presidente y de utilizar el mayor centro de poder del país para negocios". Begoña y Pedro han covertido la Moncloa en un chiringuito para forrarse. "Cierto es que no se esperaba una decisión de este calibre en este momento procesal, pero hay que recibir la citación con normalidad democrática. El juez tendrá que hacer gala de un celo milimétrico".
"Desde estas páginas seguiremos insistiendo en que, al margen de la responsabilidad penal, lo relevante es la responsabilidad política de los hechos, que el presidente podría haber asumido antes de llegar a esta situación. Pero ni Sánchez ni su mujer se han mostrado dispuestos a dar explicaciones. Sánchez podrá acogerse a la dispensa de no declarar contra su mujer, una decisión que desde el punto de vista político sería difícilmente aceptable. El relato oficialista trata de sustraer los hechos del debate público y la valoración que merecen, para así hacer creer al ciudadano que la responsabilidad política ha dejado de existir. Pero esta se abre paso cada día a través de las informaciones que la prensa libre, esa contra la que Sánchez está desplegando una atmósfera coactiva, continúa publicando". Y seguirá, se ponga el caudillo y sus secuaces como se pongan.
Iñaki Ellakuría dice que "antes que actuar como un presidente del Gobierno y proteger la institución, ofreciendo a la justicia total colaboración y transparencia, reaccionó como un esposo airado y carcomido por el pánico, que considera que la sospecha sobre las actividades de Begoña con el máster de chichinabo, en la lucrativa estela de Urdangarin con el chiringuito Nóos, es un ataque político a su persona". Y se pone a perseguir a jueces y periodistas. Él y su partido, que ya no es un partido, es una banda mafiosa.
"Es Sánchez y no el juez quien convierte a Begoña en una cuestión de Estado por su reacción esencialmente egocéntrica, propia de quien considera que su vida es una obra de arte que él protagoniza (Foucault), con sus cartas a la ciudadanía, la falsa renuncia por amor, su intento de arruinar a los medios críticos con el Gobierno mediante la estalinista propuesta de «regeneración democrática» y presentando la instrucción del caso como otro ejemplo de la general lawfare. La socialista manera de otorgar a Begoña la inmunidad ante la ley que disfrutan sólo los mandarines de sistemas autoritarios o los nacionalistas catalanes". Bueno, y ahora los delincuentes socialistas.
El País
"El PSOE se aferra a los recursos de la Fiscalía y la defensa de Begoña Gómez y habla ya del "caso Peinado"". Sí, la mafia va a por el juez. "Cunde la indignación en el Gobierno por el último movimiento del juez, en el que ven intención política. Bolaños denuncia una "persecución política despiadada" y avisa a la "jauría ultraderechista" de que hay Pedro Sánchez "para muchos años"". ¿Bolaños que se ha tomado? Últimamente está descontrolado. Jauría ultraderechista. Aquí la única jauría que hay es la mafia sanchista y sus perros mediáticos. Firma Carlos Cué, naturalmente, el jefe de la jauría mediática de Sánchez.
"Fuentes del PSOE dan por hecho que la defensa de Begoña Gómez, ejercida por el exministro socialista Antonio Camacho, presentará un recurso para oponerse a la declaración como testigo del jefe del Gobierno, en línea con la iniciativa en el mismo sentido de la Fiscalía. "PP y Vox no se saldrán con la suya. La verdad y la democracia se impondrán frente a este atropello", remataba el texto de los socialistas. Cuando Rajoy declaró nadie habló de atropello. En cuanto a la Fiscalía, Carlos, por Dios, ¿de quién depende la Fiscalía?
Pepa Bueno, como buena miembro de la jauría sanchista, se lanza a la yugular del juez. "La decisión de tomar declaración a Pedro Sánchez en su despacho y grabarla en vídeo contrasta con lo que la Ley proclama sobre este tipo de diligencias, en las que el presidente del Gobierno tiene derecho a cumplimentar por escrito el interrogatorio". Rajoy acudió al juzgado sin tantas alharacas. Oye, ni con la infanta vimos semejante espectáculo en la presa ultra. "Una extravagancia más en una instrucción llena de decisiones inexplicables".defiende con uñas y dientes el periódico ultrasanchista." Un Estado de derecho con garantías suficientes debería poder ofrecer fórmulas capaces de impedir actuaciones judiciales cuando no se atisba consistencia jurídica". Un Estado de derecho con garantías debería impedir que el presidente y su esposa se dediquen a hacer negocios aprovechándose de su cargo. Y sí, se pongan como se pongan las hienas mediáticas sanchistas hay más que indicios de que Sánchez y su mujer están delinquiendo. Y el hermano. Si es que son los Corleone.
ABC
"Moncloa se lanza contra el juez por citar a Sánchez". "Las reacciones del PSOE a la decisión del juez Peinado de tomar declaración a Pedro Sánchez como testigo son incompatibles con el respeto a la independencia judicial y a la separación de poderes. Los ataques personales al juez revelan un estado de nerviosismo evidente, el cual, a su vez, lleva a los socialistas a embarcarse en una espiral de declaraciones que persigue, sencillamente, intimidar al instructor y forzar un cierre rápido del proceso judicial abierto a Begoña Gómez", dice el editorial.
"El presidente del Gobierno estaba en el lugar y en el momento de los hechos. De los asistentes a esas reuniones, dos están investigados, Barrabés y Gómez. Nada más propio, en la dinámica normal de una instrucción, que el tercero en cuestión, Pedro Sánchez, declare lo que sepa. Es un testigo presencial, como mínimo. Vio y oyó lo que Begoña Gómez y Carlos Barrabés hablaron, negociaron y acordaron. Un testigo directo, de primera mano, beneficiario del privilegio de no acudir al juzgado. Será el juez quien acuda a La Moncloa a tomarle declaración. Y podrá acogerse al derecho a no contestar preguntas que puedan perjudicar a su esposa, no así a los otros investigados, Carlos Barrabés y el rector de la Complutense, Joaquín Goyache". A ver si se enteran en El País. Y en el PSOE.
El presidente del Gobierno estaba en el lugar y en el momento de los hechos. De los asistentes a esas reuniones, dos están investigados, Barrabés y Gómez. Nada más propio, en la dinámica normal de una instrucción, que el tercero en cuestión, Pedro Sánchez, declare lo que sepa. Es un testigo presencial, como mínimo. Vio y oyó lo que Begoña Gómez y Carlos Barrabés hablaron, negociaron y acordaron. Un testigo directo, de primera mano, beneficiario del privilegio de no acudir al juzgado. Será el juez quien acuda a La Moncloa a tomarle declaración. Y podrá acogerse al derecho a no contestar preguntas que puedan perjudicar a su esposa, no así a los otros investigados, Carlos Barrabés y el rector de la Complutense, Joaquín Goyache.
"El PSOE se ha revuelto contra jueces y periodistas. La típica reacción de un partido mutado en séquito personal de su máximo dirigente y en caída libre hacia la confusión con las prácticas iliberales de partidos formalmente democráticos y materialmente totalitarios". Y de las bandas mafiosas.
"Realmente, el problema del presidente del Gobierno no es que sea llamado a declarar como testigo, aun con sus privilegios procesales. El problema de Sánchez es que, con lo que ya se sabe, sin más adiciones, es suficiente para que asuma su responsabilidad política por los negocios privados que su esposa cerró en La Moncloa, aprovechando su condición conyugal, que no por sus méritos académicos". Eso que el periódico del régimen llama "catedra extraordinaria".
"La ética pública en una democracia y la honradez de sus dirigentes no dependen de los jueces, porque hay conductas de una inmoralidad incuestionable que no son delictivas. Y así sucede con los negocios privados urdidos en La Moncloa". En el PSOE no queda ni rastro de vergüenza.
Isabel San Sebastián descubre hoy que "el PSOE ha dejado de ser una formación política al uso para convertirse en una secta dedicada a rendir culto a su líder. En otras palabras; el antiguo Partido Socialista ha mutado en Sanchismo descarnado, sin otro propósito o ideología que la perpetuación en el poder de Sánchez". "Los autoproclamados adalides de la progresía aceptan con mansedumbre ovina que el cacareado progreso resplandezca en las carreras profesionales de Begoña y David, la 'famiglia' del 'padrino', sumidos en sendos escándalos sin precedentes en la democracia". Y se lanzan como perros de presa contra quien ose llamar a las cosas por su nombre.
La Razón
"El juez pone en el foco a Sánchez y le interrogará en la Moncloa". "El PP acusa al PSOE de emprender una "auténtica cacería" contra el juez Peinado tras citar a Sánchez". Pero cacería. Los jueces, los medios. ¿Dónde se detendrán la mafia socialista y su banda? "La estrategia sanchista es descalificar al juez Peinado por atreverse a investigar las actividades empresariales de la mujer del presidente", denuncia Marhuenda. " La reacción del PSOE, el Gobierno y la izquierda mediática es tan extemporánea como esperpéntica. "Lo inusual es que Begoña Gómez cuente con esta colección de fervorosos hooligans aficionados al Derecho en su partido y en la izquierda mediática que solo saben descalificar e insultar. Es la primera vez que sucede, ya que ni vimos ni escuchamos este tipo de reacciones cuando los casos afectaban a dirigentes del PP o miembros de la Familia Real. La prudencia y el respeto de entonces se han convertido ahora en comentarios imprudentes e irrespetuosos. Sánchez debería contener a esta jauría política y mediática porque no favorece su causa y alienta el frentismo". Pero Marhu, si Sánchez es el jefe de la manada.