
El Mundo
"Aldama detalla la corrupción integral con 6 ministros y la cúpula del PSOE: ‘Si Sánchez quiera pruebas, las tendrá’". Todo el partido con el lodo hasta el cuello. Para informarse de todos los detalles vaya a www. libertaddigital.com. "La gravedad de los presuntos delitos y la cantidad de ministros y altos cargos involucrados trazan la dimensión del escándalo. De acreditarse aunque sólo fuera una parte, cabría afirmar que en el Gobierno que emergió a lomos de la lucha contra la corrupción del PP ha operado una red corrupta de carácter integral y con una penetración desconocida tanto en el Ejecutivo como en el PSOE", dice el editorial impresionado.
"Sánchez afirmó ayer que todo es una «inventada» y que «este personaje» basa su defensa en «la mentira». La Justicia dirá quién miente. Por ahora, Sánchez ha comprometido su palabra cuando, tras la fotografía publicada por este periódico, sostuvo ante un grupo de periodistas y sin cámaras que nunca había cruzado una palabra con Aldama. El comisionista dice, en cambio, que la foto se produjo porque Sánchez quería conocerle, y que le agradeció sus gestiones". Cada vez que leo algo sobre la palabra de Sánchez me echo a reír. "Sánchez ha comprometido su palabra". Sánchez no tiene palabra, hombre, vale ya con la palabra de Sánchez. "Hoy los hechos que relata Víctor de Aldama deben acreditarse, pero dibujan un escenario de putrefacción demasiado conocido que nunca acaba bien".
Bustos ruega: "No te vayas todavía, Pedro". "Ahora más que nunca cabeza fría, nervios de acero, conciencia estrangulada y manual de resistencia. No tienes derecho a desamparar a todos los horteras que medraron a tu sombra, del penúltimo productor audiovisual a la primera tuitera enamorada. Pero sobre todo no tienes derecho a robarnos la fantasía de verte salir esposado del palacio de la Moncloa", dice Bustos consciente de que eso no va a ocurrir, pero se regodea imaginanandolo. "¿No eres el presidente de las primeras veces? ¿Por qué no inaugurar también la orla de los presidentes procesados en democracia?". Mmm, calla Bustos, no hagas volar nuestra imaginación, no hagas realidad nuestros sueños, que los sueños, sueños son.
"Ni se te ocurra dudar. Es el momento del último acelerón, la prórroga del final de la escapada perseguido por la sombra de tus otros yoes, por tus fotos más poligoneras, por los negocios de tu pulcra y honesta esposa. Los socios te sostendrán. No porque odien a la derecha sino porque odian el diseño sutil de la democracia liberal —con sus enojosos contrapoderes— tanto como tú. Y ellos jamás dispondrán de un rehén tan suplicante como tú, de un presidente tan barato como tú, de un narciso tan delirante como tú". De un psicópata como tú.
"No te detengas ahora. Alinea a tus palmeros en formación de tortuga, agita ante sus famélicos ojos los fajos de la publicidad pendiente, prende simultáneamente tres o cuatro hogueras y escapa de nuevo en mitad del humo", dice en referencia al equipo de opinión sincronizada, es decir la SER, El País, Ferreras, Escolar, Intxaurrondo, Cué... Los pelotas de Sánchez en los medios. "Es hora de disciplinar definitivamente al poder judicial, quizá aún estés a tiempo, sofoca esos anacrónicos escrúpulos susurrados desde Bruselas, pregunta a Orban cómo lo hizo ahora que sois aliados". Sí, sí, ese peligroso facha, ultraderechista como le calificaba Sánchez hasta que necesitó sus votos. Como Puigdemont era un delincuente huido hasta que se convirtió en socio al necesitar sus votos. Ay, Sánchez.
"No toleres el más mínimo asomo de autocrítica en tu entorno. Acomete una purga aparatosa en el congreso federal. No dejes vivo a nadie". Bueno, eso está prácticamente hecho, por ese lado no hay problema. "Resiste, resiste, resiste. Hasta el final. Hasta el último día. Hasta que no quede nada en pie. Ni siquiera la monstruosa mentira que has interpretado desde que aprendiste a hablar". Yo creo que antes, Jorge, cuando berreaba de bebé ya estaba mintiendo. Seguro que hasta sus ecografías son mentira.
Federico Jiménez Losantos compara lo que está sucediendo con Sánchez con lo que paso con Felipe González. "Cuando Amedo y Domínguez empezaron a hablar sobre los GAL, el PSOE felipista hacía la misma pregunta retórica que Sánchez ayer: ¿quién puede creer a un delincuente que sólo busca aliviar su situación judicial? Y los agradaores de ayer, palmeros hoy, precisaban: "¿A quién creer, a un delincuente o al presidente del Gobierno?"". Cuando lo del GAL, Míster X, es decir, Felipe González, dijo: "No hay pruebas, ni las habrá". "Las hubo, y el ministro del Interior y su segundo acabaron en la cárcel de Guadalajara, mientras cientos de altos cargos del PSOE, siempre el PSOE, jugaban al corro de la patata, de la manita, rodeando el penal".
En fin, volviendo al presente. "Aldama retrata a un gobierno dentro del Gobierno, como en los regímenes comunistas o de partido único: hacia fuera, un Ejecutivo abigarrado e ineficiente; hacia dentro, una cleptocracia insaciable. Y Aldama, el gran conseguidor, siempre estaba allí, repartiendo billetes". "El problema de Sánchez es que él, su señora, su partido y su Gobierno han dejado tanto rastro delictivo que no hay que buscar pruebas, que sobran, empezando por la foto, sino de poner fecha a los delitos. Aldama lo ha hecho, y no es para agradecérselo, pero sí para aprovecharlo. No todos los días compruebas que tu país es una sucursal de un cartel del narcotráfico". Y pensar que hasta ahora nunca oímos hablar de él.
El País
"El Gobierno ve salvada la legislatura y se burla de las acusaciones de Aldama", dice el sirviente número uno de Sánchez en los medios, Carlos Cué. "Vio cómo el empresario Víctor de Aldama se lanzaba en sede judicial directamente contra el presidente, el secretario de organización del PSOE, la ministra de Hacienda y el de Política Territorial. Un ataque directo con acusaciones de delitos graves que provocó un rápido desmentido indignado y el anuncio de medidas legales contra él, pero que Alberto Núñez Feijóo aprovechó inmediatamente no solo para pedir de nuevo la dimisión de Pedro Sánchez, sino para animar a PNV y Junts a apoyar una moción de censura para echarle". ¿Como hizo Sánchez con Rajoy, quieres decir, Cué? Porque cualquiera diría que en el caso del PSOE te parece bien, pero si lo hace el PP te parece mal. Y eso en un periodista de prestigio como tu queda mal, muy mal, huele a periodista podrido.
"El PP cree haber encontrado el elemento de desgaste definitivo con la declaración de Aldama, a la que Feijóo da toda la credibilidad. Sin embargo, en el Gobierno no se respira el ambiente de inquietud que podría ser lógico ante una acusación de esta magnitud, sino de euforia por la votación exitosa y de desprecio absoluto, incluso burla por las acusaciones de "Aldama. Sánchez compareció en tono burlón: "¡Vaya inventada!", llegó a decir con una sonrisa. Poco antes, en la zona de Gobierno, varios ministros le vieron reírse de las cosas que había dicho Aldama en su declaración, que le parecen no solo falsas sino fantasiosas". Ay, qué risa, tía Felisa. El que ríe el último ríe mejor, ojo. Palabra contra palabra, de momento. Y ya sabemos lo que vale la de Sánchez. Para el Ejecutivo, todo esto quedará en nada porque el empresario no aportó una sola prueba de lo que estaba diciendo, y por tanto se deshará con el tiempo". Sí, eso pensaba Felipe González. Veremos. Tampoco se creyó nadie lo de Koldo, Ábalos y Jessica, y ya vez.
"Aldama esparció sospechas de corrupción sobre medio Gobierno de Pedro Sánchez al revelar el supuesto pago de mordidas a media docena de dirigentes o la existencia de numerosas reuniones con altos cargos para tratar sobre ayudas públicas a empresas. Sánchez quiso personalmente ponerse a tiro de los periodistas en el Congreso para decir que "todo es categóricamente falso", tildó al empresario de "personaje" y le retó a aportar pruebas", dice el editorial, que se limita a cargarlo todo en los hombros de Ábalos.
"En esa declaración soltó una retahíla de nombres entre los que estaban el ministro Ángel Víctor Torres, el jefe de gabinete de la vicepresidenta María Jesús Montero, o el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán. No aportó una sola prueba, más allá de su palabra y de que pudiera corroborarlo Koldo García, presunto intermediario".
"La mancha de sospecha esparcida por Aldama es muy extensa y provoca una comprensible alarma social. Si está mintiendo como parte de una estrategia procesal —tras la declaración, obtuvo la libertad por el otro caso que lo mantenía encarcelado, apoyado por la Fiscalía—, los señalados tienen que limpiar su imagen cuanto antes, y Sánchez tiene que encabezar esa defensa como hizo este jueves. En un juzgado, la carga de la prueba corresponde al que acusa. En el tribunal de la opinión pública, no". La opinión pública de este país deja mucho que desear, todo hay que decirlo. Cuando González estaba de corrupción hasta el cuello, volvió a ganar las elecciones. Sólo cayó por la crisis económica.
ABC
"Aldama abre en canal al PSOE". "Aldama pone en jaque a Sánchez: «No se preocupe, tendrá pruebas»". Uf, da escalofríos. Le llamo "presunto delincuente", como ya hizo con el novio de Ayuso. Sánchez debería tener cuidado con las cosas que dice. "Lo mismo que dice de Víctor de Aldama tendría que decirlo de su propia esposa, Begoña Gómez, quien, aun no estando en prisión provisional como el empresario amigo del PSOE, está igualmente investigada por un juzgado", dice el editorial poniendo es su sitio al supuesto marido de una presunta delincuente. "Sánchez reconoce o niega credibilidad dependiendo de quién sea el presunto delincuente, porque el PSOE ha creído, y mucho, a presuntos delincuentes cuando el cuestionado era el PP". Si, ya sabemos con qué tipo de presunto criminal nos enfrentamos.
"Por supuesto, Aldama tendrá que probar cuanto ha dicho si quiere que tenga alguna relevancia en el proceso judicial en el que está inmerso; pero hay dos indicios, al menos, que apuntan a que sus declaraciones distan de ser fuegos de artificio". "Es posible, teóricamente, que sea un fabulador; pero no es probable que todo cuanto ha dicho sea una fabulación. Hay mucho nombre y apellido, cifras muy concretas, datos precisos de tiempo y lugar".
En cuanto a lo que interesa, que es que Sánchez dimita, Ignacio Camacho es tan optimista como muchos, o sea, nada. "Los socios que se arracimaron en la moción de censura contra Rajoy se muestran poco dispuestos a plantarse por la cuenta que les trae. Les quedan muchas facturas por cobrar y la debilidad cada vez más flagrante del Ejecutivo facilita el chantaje. Se taparán la nariz para fingir que no les llega el hedor insoportable de esa Moncloa cuyos habitantes se han atrincherado para resistir los embates procesales. La opinión pública 'progresista' tampoco es muy proclive a rebelarse cuando los suyos se encuentran en dificultades". Prietas las filas, que diría Felipe González.
La Razón
"Aldama acorrala a Sánchez y salpica al Gobierno con las «mordidas»". "La declaración ante el juez del empresario Víctor de Aldama, el «conseguidor» de la «trama Koldo», ha resonado con estruendo en el mismísimo Palacio de la Moncloa. El comisionista había pedido declarar voluntariamente y durante dos horas no dejó títere con cabeza". Dice Marhuenda, en referencia a los coros y danzas sanchistas en los medios, que "es curioso que cuando este tipo de asuntos afectaban a personajes del PP o al propio partido se utilizaron hasta la extenuación y sus protagonistas tenían presunción de veracidad. Por supuesto, la corrupción que afectaba a militantes del PP era gravísima, mientras que ahora son las mentiras de un personajillo". El PSOE les unta muy bien, pero además lo hacen gustosos.
"Alberto Núñez Feijóo ha reaccionado como líder de la oposición, exigiendo la dimisión de Sánchez y ofreciendo a los socios del Gobierno que exploren una moción de censura para «acabar con la podredumbre, las mentiras y la corrupción». Su oferta caerá en saco roto porque los «mutualistas» del Ejecutivo tienen todavía mucho que ganar", dice el editorial. Y porque no se lo creen. Aldama debe darse prisa en mostrar sus pruebas o todo lo que dijo ayer quedará en agua de borrajas.