Nuevo varapalo a Ábalos: el Supremo da por acreditado que Aldama estaba en su Ministerio con "particular frecuencia"

Otro auto del Supremo y otro varapalo a José Luis Ábalos. El alto tribunal considera acreditado que Víctor de Aldama estaba en sede ministerial y en la zona del ministro con "particular frecuencia". Y eso supone que la conexión entre Aldama y Ábalos se da ya por probada a efectos de la trama.

Un nuevo auto del Supremo ha señalado lo siguiente: "Interesa también la parte que se libre oficio al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible para que por su servicio de control de accesos de entrada emitan certificación relativa a los que hubiera podido realizar don Víctor Gonzalo de Aldama durante los años 2020 y 2021, precisándose a qué dirección general, departamento o negociado se dirigía".

El magistrado Leopoldo Puente toma nota de otra petición de las defensas: "También interesa, aunque tampoco explica los motivos, que dicha certificación se haga extensiva a las visitas que iban dirigidas al subteniente de la Guardia Civil don José Luis Rodríguez (en este caso entre los años 2020 y 2023). Y, finalmente, interesa también que la certificación se refiera a las visitas realizadas por los miembros de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil durante el año 2023". Y responde el Supremo: "No acierta a comprender quien ahora resuelve la relevancia que para la Instrucción de la presente causa especial pudiera tener el número de visitas realizadas al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, durante el año 2023, por agentes de la U.C.O. Tampoco se comprende, y no ofrece la defensa del Sr. Ábalos Meco asistencia alguna en este aspecto, la importancia que pudieran tener, --siempre con relación a los hechos que aquí se investigan--, las visitas que al Ministerio pudieran haberse realizado, aquí entre los años 2020 y 2023, por parte del Sr. de Aldama Delgado al referido subteniente de la Guardia Civil don José Luis Rodríguez".

El caso PSOE avanza

Pero tras el reproche a la defensa de Ábalos, llega el mazazo: "Por lo que respecta a las visitas que pudiera haber efectuado al Ministerio el Sr. de Aldama durante los años 2020 y 2021, con expresión de la dirección general, departamento o negociado al que se dirigía, ello podría tener alguna significación, si no fuera debido a que, además de lo afirmado por él mismo (quien asegura que disponía de un acceso directo autorizado, que le permitía incluso emplear el ascensor que conducía a las puertas del despacho del Sr. Ministro), todos cuantos han declarado sobre este aspecto en particular a lo largo de la instrucción de la presente causa especial, incluido el propio Sr. Ábalos Meco, han expresado que el Sr. de Aldama se encontraba con frecuencia en el despacho profesional del también investigado don Koldo García Izaguirre, contiguo al del Ministro, emplazados ambos en una zona de acceso restringido al público".

Es más, "ya en la declaración voluntaria prestada por el propio Sr. Ábalos Meco en esta causa especial, éste expresó que es verdad que al Sr. de Aldama lo vio "muchas veces" en el despacho de don Koldo García, "que era el antedespacho" al del Ministro. Incluso, la Sra. Pardo de Vera, Presidenta en esas fechas de ADIF y quien, por tanto, visitaba ocasionalmente la planta y zona en la que se hallaba el despacho del Sr. Ministro, aseguró también que, pese a ello, con frecuencia reparó durante esas visitas en la presencia allí del Sr. de Aldama, al punto de que llegó a interesarse por quién era esa persona". Así pues, "fuera uno u otro el modo en que el Sr. de Aldama accedía a las dependencias del Ministerio y, en particular, al despacho de don Koldo García, contiguo al de don José Luis Ábalos, y fuera un número u otro exactamente el de las visitas en esa época, lo cierto es que todos cuantos sobre este extremo han tenido ocasión de pronunciarse al respecto, incluso la parte que ahora propone la práctica de esta, -por eso, innecesaria-, diligencia de investigación, coinciden en señalar que el Sr. de Aldama Delgado se encontraba allí con particular frecuencia". Y añade el Supremo: "No alcanza a comprender este instructor la importancia que proyectaría en la presente causa que estas visitas fueran concretamente 15, 39 o 75".

El anterior auto del magistrado Puente asestó ya otro rotundo mazazo a José Luis Ábalos. Con pisos, casas y suelo dentro y fuera de España, con una fundación ligada al PSOE, con prostitutas en cargos públicos, con un papel más que relevante en la trama de las mascarillas, en el rescate de Air Europa, en las obras públicas investigadas, en la llegada de Delcy, etc., el Supremo no se anduvo por las ramas: "Existen numerosísimos indicios reforzados tras las declaraciones testificales" contra Ábalos.

El caso PSOE avanza. Y no lo hace en la dirección que le gustaría ni a Ábalos ni a Pedro Sánchez.