El Gobierno continúa guardando un llamativo silencio sobre el premio Nobel de la Paz para María Corina Machado por su incansable lucha por la libertad y su valentía al enfrentarse a la tiranía chavista en Venezuela. Ni Pedro Sánchez ni José Manuel Albares han dicho palabra sobre el galardón, mutismo al que se han sumado el resto de miembros del Gobierno. El único que ha hablado ha sido el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, pero sólo porque le preguntaron los periodistas.
En declaraciones desde la sede del Ministerio, Bolaños ha sorprendido al afirmar que no le "correspondía" a él valorar el galardón, sobre el que ha habido unánimes elogios en las principales democracias occidentales. Mientras la extrema izquierda española sí hablaba en redes para cargar contra la líder opositora, Bolaños sólo ha acertado a decir que el Gobierno español está en la defensa de los Derechos Humanos y "trabajó intensamente para que fuera liberada el tiempo que estuvo en prisión".
España, ha afirmado, es un país comprometido con los Derechos Humanos, la democracia y la paz. Ni siquiera ha dicho el nombre de la galardonada.
