
Las elecciones en Extremadura que ganó el bloque de la derecha con el 60% de los votos han abierto un nuevo horizonte político en el que Vox, partido que sigue creciendo, quiere condicionar su apoyo a un PP en minoría si no cede en determinados aspectos clave para la formación de Santiago Abascal. Todo esto sucede con varias convocatorias electorales a la vista en Aragón en febrero, Castilla y León en marzo y Andalucía, en principio, a principios del verano de 2026.
La relación entre ambos partidos a la derecha del PSOE no pasa por su mejor momento a nivel nacional mientras en distintos puntos de la geografía española siguen condenados a entenderse para sacar adelante presupuestos o apoyar gobiernos. Es el caso de Zaragoza. En la cuarta ciudad de España por población los de Julio Calvo han decidido no votar a favor de las cuentas que habían negociado con el PP justo después de las elecciones en Extremadura.
En el programa Es la Mañana de Federico de esRadio la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha explicado lo sucedido con Vox. Ha contado que "este es el tercer presupuesto ya de la legislatura que hemos acordado pactar con Vox" y que lo que suelen hacer es "primero lo trabaja el Gobierno, el PP, después lo compartimos con ellos confidencialmente para introducir algunas partidas que ellos nos piden o ajustar algunas con las que ellos no se sientan cómodos, de tal forma que lo hemos llegado a presentar juntos los dos años anteriores y por lo tanto la tramitación es un trámite".
"Este año llevábamos pactando el presupuesto desde octubre, lo teníamos cerrado a finales de noviembre, para empezar a montar todo el expediente que lleva unas cuantas semanas. Habíamos pactado el presupuesto y de repente el otro día antes de Navidad nos dijeron que se caían del presupuesto, que ya no iban a apoyarlo. Y no solamente eso, porque a mí, aunque se abstuviesen, me valía, simplemente dijeron que iban a votar que no", ha explicado la alcaldesa de Zaragoza. La dirigente popular ha afirmado que "esto es una traición que no nos esperábamos porque realmente los votantes de Vox no votan a Vox para que bloquee al PP o para que bloquee la ciudad de Zaragoza en un proyecto de transformación como el que estamos llevando a cabo y que, además, lo hemos hecho siempre de forma colaborativa, colaborando con ellos".
Natalia Chueca cree que "los votantes de derecha, sean de Vox o del PP, entienden que Vox es un partido que tiene que apoyar al PP para cambiar las políticas de izquierdas que habían estado en vigor anteriormente en la ciudad de Zaragoza o en el futuro en España". La alcaldesa de la capital aragonesa ha señalado que "la contradicción es que hoy Vox no solamente ha traicionado al PP después de haber negociado el presupuesto, justo cuando se iba a presentar y estábamos esperando el informe del interventor para presentarlo, sino que ayer mismo, cuando yo presenté el presupuesto salieron después a decir que había un proceso de enmiendas y que iban a pactar enmiendas con PSOE y con Zaragoza en Común para cambiarlo o para bloquearlo. Me parece grave".
La alcaldesa de Zaragoza ha hablado de su relación con el portavoz de Vox en la ciudad, Julio Calvo, y de cómo el partido cambió de parecer cuando lo tenían todo ya negociado. Ha dicho que habló con él "después de las elecciones de Extremadura para asegurarme de que no había tenido cambios por parte de la dirección nacional después , y fue cuando él me constató y me confirmó que no iban a apoyar el presupuesto lamentablemente por causas ajenas a ellos".
La llamada desde la sede nacional de Vox hizo que los concejales del partido de Santiago Abascal decidieran no apoyar al PP. Natalia Chueca ha contado que los miembros de Vox en Zaragoza han "trabajado" e "impulsado" un presupuesto que "para ellos les está dando un buen resultado porque los ciudadanos, los vecinos de Zaragoza, están viendo que Vox es útil en Zaragoza". Ha dicho que "lejos de otros lugares donde están en una confrontación permanente con el PP aquí habíamos entendido que podíamos dejar a un lado las diferencias de los dos partidos y centrarnos en la gestión de la ciudad en un ayuntamiento que tiene también una menor carga ideológica para poder avanzar y para poder generar riqueza, empleo y transformar la ciudad". "Después de todo el trabajo de dos meses, él salió con algunas excusas como la deuda o la Zona de Bajas Emisiones, cuestiones ajenas a la realidad, para simplemente desmarcarse. Pero está claro que responde a una estrategia nacional y a una decisión nacional", ha lamentado.
Cree la alcaldesa de la capital de Aragón que "la cuestión es que, efectivamente, me parece que se equivocan de enemigo. El enemigo no es el PP; a quien tenemos que echar y tenemos que hacerlo juntos, si no podemos hacerlo solos el PP es a Pedro Sánchez, es al PSOE, que es el que está degradando institucionalmente España, el que nos está llenando de corrupción, el que el que ataca a las mujeres con casos de corrupción y de acoso sexual y con todos los escándalos que estamos viendo, generando desigualdad entre los españoles". Ha insistido Chueca en "que se vaya contra el PP sin duda, yo creo que no es lo que quieren los votantes de Vox y, de hecho, a muchos ha sorprendido la decisión de Vox en el Ayuntamiento de Zaragoza de que se abra a pactar con PSOE y Zaragoza en Común para bloquear Zaragoza y al PP".
Natalia Chueca ha dicho que es "muy difícil" y "muy decepcionante" esta "traición" de Vox. La alcaldesa de Zaragoza ha dicho que lo ha "sentido como una traición, porque llevo dos años y medio trabajando con ellos" y "en la pasada legislatura, en la que también el PP tenía minoría, Vox también apoyaba los presupuestos y trabajábamos de forma colaborativa porque tenemos muchos puntos en común en la visión de cómo gestionar la ciudad". "Pero lamentablemente ahora han antepuesto sus intereses partidistas, pero no los de Zaragoza, sino los que pueda tener Santiago Abascal en Madrid porque ha antepuesto sus intereses a los intereses locales de la ciudad".
En este sentido, ha dicho que "esto, sin duda, cambia la relación y rompe la confianza que habíamos construido. Pero sobre todo más que traicionarme a mí, creo que se ha traicionado a los ciudadanos zaragozanos, a los vecinos de Zaragoza y especialmente a los votantes de Vox, que no votaron a Vox para que paralizase Zaragoza o para que bloquease al PP, sino para que ajustase sus políticas o colaborase con el PP contra la izquierda y no pactaran con la izquierda contra el PP, es que es el mundo al revés". "Los votantes de Vox, muchos de los votantes de Vox no lo entienden esto y no es lo que ellos querían ni lo que ellos votaron", ha apuntado.
La alcaldesa de Zaragoza ha dicho que "ayer mismo, que fue cuando salieron en declaraciones los concejales de Vox diciendo que empezaban a negociar enmiendas con el PSOE y con Zaragoza en Común hubo una cascada de comentarios negativos en las redes, en los medios de comunicación y en la calle, de votantes decepcionados de Vox que avisaban que esto les iba a costar el voto, que sin duda no iban a apoyarles". En este sentido, ha indicado que "veremos en qué se traduce, pero la realidad es que ha sido muy decepcionante para todos los votantes de Vox, que nunca se habían esperado que Vox fuese contra el PP en lugar de ir contra el PSOE, que es lo que dice y anuncia normalmente".
Sobre el proceso a seguir a partir de ahora ha añadido que "vamos a seguir la tramitación" porque "ahora empiezan las comisiones y el momento de presentar enmiendas. Veremos qué enmiendas presentan porque ya han anunciado que van a presentar enmiendas al propio presupuesto que ellos habían cerrado y negociado con nosotros". "A partir de ahí, si hay un rechazo después de las elecciones del 8 de febrero, que será cuando se vote definitivamente el presupuesto, pues tendré que hacer una cuestión de confianza donde tendrán un mes para presentar una alternativa y ahí tendrá que decidir Vox si quiere hacer a la portavoz del PSOE, alcaldesa de Zaragoza y apoyar su proyecto o yo seguiré como alcaldesa con el presupuesto que hemos negociado y hemos pactado juntos porque yo no lo he cambiado y he seguido adelante con el mismo presupuesto que habíamos cerrado juntos".
En este sentido ha dicho que ella "tendría la solución fácil, que es hacer una prórroga del presupuesto del 2025, pero se prorroga únicamente pues lo que es el gasto obligatorio y, por lo tanto, estaría dejando de crecer". "Mi presupuesto de este año tiene un crecimiento del 6% que me permite seguir acometiendo inversiones, más de 200 millones de euros en inversión en distintos proyectos para la ciudad, en transformar las calles, las avenidas, en construir equipamientos que demandan los vecinos en todos los barrios, en todos los distritos y, por lo tanto, si prorrogase los presupuestos estaría muy limitado porque tendría carencias y no tendría posibilidad de invertir en todos estos proyectos que no son contratos obligatorios o los gastos de personal, que es lo que sí que te asegura una prórroga del presupuesto, sino que son los proyectos más voluntarios o más de transformación", ha explicado.
Natalia Chueca ha insistido en que "sin duda, es lo que yo no quiero. Yo no quiero algo que perjudica a la ciudad de Zaragoza y prorrogar los presupuestos la perjudica porque no podemos acometer las inversiones en vivienda, las inversiones en seguridad, la mejora de los servicios públicos de los servicios sociales y por supuesto toda la transformación urbanística que está teniendo lugar en Zaragoza". "Hacía décadas, después de 16 años de izquierdas, que no se invertía absolutamente nada en la ciudad de Zaragoza, pues nunca habíamos vivido un momento de transformación y de crecimiento como el que estamos viviendo ahora y no quiero paralizarlo", ha finalizado.

