La última sesión de control al Gobierno antes del 28-M ha estado marcada por la polémica de las listas electorales de Bildu en un ambiente muy tenso, propio de la contienda electoral, que ha derivado incluso en la expulsión de la diputada de Vox, Teresa López, cuando repasaba la Historias sanguinaria de ETA durante una interpelación parlamentaria de los de Arnaldo Otegi.
Presidía en ese momento el Congreso Gloria Elizo, de Unidas Podemos, en sustitución de Meritxel Batet, que ha llamado tres veces a la cuestión a Teresa López, de Vox, por relatar sólo algunos de los crímenes más execrables de la banda terrorista para criticar al PSOE por pactar con ellos. "ETA está en las instituciones gracias al PSOE de Zapatero y al PP de Rajoy", denunciaba la representante del partido de Santiago Abascal que señalaba después a Pedro Sánchez por "pisotear la memoria de las víctimas del terrorismo".
Cuando la diputada no llevaba ni dos minutos de intervención, Elizo la interrumpía para llamarla por primera vez a la cuestión, a lo que López hacía oídos sordos para seguir adelante con su discurso, recordando la inclusión de terroristas en las listas de Bildu. "La llamo por segunda vez al orden", volvía a intervenir la presidenta del Congreso, a lo que la representante de Vox le respondía que "estaba en la cuestión".
A los tres minutos de empezar a hablar en la tribuna de oradores del Congreso, la representante de Unidas Podemos la llamaba por tercera vez a la cuestión para a continuación echarla del Parlamento, decisión ante la que López se resistía discutiendo fuera de micro con la presidenta del Congreso, sin éxito. "Le ruego señora López que abandone la tribuna y respete la Cámara y la presidencia de esta Cámara, le ruego que mantenga su educación como ciudadana como parlamentaria y abandone la tribuna", le reprendía Elizo.
Los diputados de Vox aplaudían de forma enérgica la intervención de su representante que se veía obligada a abandonar el la tribuna de oradores para regresar a su escaño, donde recibía la enhorabuena de sus compañeros entre reproches de la presidenta del Congreso que les reclamaba silencio y respeto.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha salido en su defensa a través de Twitter advirtiendo de que la próxima vez tendrá que acudir la policía para que salga el diputado de su partido expulsado estando en uso de la palabra, como en el caso de Teresa López, víctima además de ETA como hija de funcionario de Prisiones amenazado por la banda terrorista y que recibió un paquete bomba en 1992,
La próxima tendrá que ser la policía la que obligue a nuestros diputados (en este caso una diputada víctima del terrorismo ) a abandonar la tribuna. Y que se queden dentro los etarras y sus socios , y todos los que les amparen.
— Santiago Abascal 🇪🇸 (@Santi_ABASCAL) May 17, 2023
Ya gritaremos fuera las verdades que quieren oír los… https://t.co/E2fQvMl1vU
Y es que no es la primera vez que Vox ve cómo sus representantes en las Cortes son expulsados de la tribuna o el Congreso durante sus intervenciones parlamentarias. Así ocurrió recientemente con la portavoz Patricia Rueda cuando denunció que el Gobierno "premia a los filoetarras", lo que le valió que el socialista Félix Gómez de Celis la echara.
También la senadora Pepa Millán fue llamada tres veces a la cuestión por el presidente de la Cámara Alta, el socialista Ánder Gil, cuando denunciaba los pactos del Gobierno con los separatistas para eliminar el delito de sedición. La presidenta de las Cortes, Meritxel Batet, expulsó también a Macarena Olona de la Diputación Permanente por querer incluir una iniciativa sobre Cataluña que no estaba prevista en el orden del día. La diputada estaba en avanzado estado de gestación en ese momento.