Yolanda Díaz y Puigdemont se comprometen a "explorar todas las soluciones democráticas" para investir a Sánchez

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, y el expresidente prófugo de la Justicia Carles Puigdemont, se han retratado muy sonrientes y animados. Les acompañaban por parte de Díaz Jaume Asens y por parte de Puigdemont, otro fugado, Toni Comín.

Ambiente distendido en el posado para los fotógrafos con una vicepresidenta particularmente risueña. También estaba muy contento Puigdemont. Por primera vez desde su fuga, de la que el próximo mes de octubre se cumplirán seis años, recibe en Bruselas de manera oficial a un miembro del Gobierno de España. Ha pasado de prófugo a aliado indispensable gracias al 23-J y explota su nueva condición.

Ninguno de los dos ha hecho declaraciones tras la reunión, de más de dos horas, celebrada en una sala de la sede bruselense del Parlamento Europeo. La conclusión de Yolanda Díaz, expresada a través de la red social X, es que "el diálogo es un método y un compromiso. Para impulsar avances sociales y para caminar hacia un país plurinacional donde la política sea el centro de las soluciones. Seguiremos hablando, seguiremos buscando salidas en el diálogo y la democracia".

Por la misma vía ha reaccionado Puigdemont: "El encuentro que hemos tenido este mediodía con Yolanda Díaz, Jaume Asens y Toni Comín es parte de la normalidad democrática en la Unión Europea. Dialogar y mantener relaciones políticas entre formaciones de diferentes ideologías no debería constituir ninguna sorpresa y ninguna excepcionalidad".

Algo más extensa ha sido la reacción de Sumar, la plataforma de Yolanda Díaz, que ha emitido un comunicado en el que califica la reunión de "fructífera" y asegura que "permite establecer una relación normalizada y estable entre las dos formaciones políticas". "Compartimos -añade a continuación- la profunda convicción de que la política tiene que hacerse desde el diálogo y los principios democráticos. En este sentido, estamos de acuerdo en explorar todas las soluciones democráticas para desbloquear el conflicto político. Compartimos la profunda convicción de que los problemas políticos tienen que volver a los cauces políticos, para encontrar soluciones basadas en el diálogo. La democracia consiste en el diálogo entre posiciones diferentes".

Amnistía y autodeterminación

En la alusión a las "soluciones democráticas" cabe tanto la amnistía como un referéndum de autodeterminación que culmine el camino iniciado con el golpe de Estado de 2017. Moncloa ha tratado de desmarcarse de la visita de Díaz a Puigdemont y ha deslizado que la vicepresidenta ha viajado a Bruselas en calidad de líder de Sumar, que la iniciativa es ajena al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y al PSOE. Pero Sánchez no ha querido referirse al desplazamiento de la vicepresidenta en una intervención en el Ateneo de Madrid y se ha limitado a proponer "audacia" para superar el "conflicto", "pasar página" y "no repetir los errores del pasado".

Con la visita de Díaz a Puigdemont se da el pistoletazo de salida a la negociación de cara a la investidura de Sánchez. Este martes, el prófugo pronunciará una conferencia en la que dará cuenta de las reivindicaciones de Junts per Catalunya (JxCat) para facilitar la reedición de un Gobierno socialcomunista liderado por Sánchez.

En el PSOE y en relación al encuentro entre Díaz y Puigdemont aducen que ellos son partidarios de la discreción, que el encuentro "no compromete a los socialistas" y se afanan en difundir que todos los acuerdos a los que puedan llegar con los separatistas no se saldrán del marco de la Constitución.

Críticas de Feijóo y Abascal

En cuanto al PP, a pesar de la intención de Albert Núñez Feijóo de contactar con Junts en su ronda de contactos para la investidura, ha sido el propio dirigente del PP quien ha emitido el siguiente tuit: "Hoy, el Gobierno se reúne con un prófugo de la justicia en Bruselas. Han ido a negociar una amnistía contraria a la Constitución y referéndums de autodeterminación. Los intereses de Pedro Sánchez no pueden condicionar la política de nuestro país".

Por su parte, el líder de Vox Santiago Abascal ha señalado que el encuentro con un prófugo es un caso de "extrema gravedad" y ha alegado que en Vox comparten la tesis del presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, de que "Junts no es un interlocutor válido".