
Este viernes, fueron los actos institucionales del día de Baleares, y la comidilla entre los diputados era el plantón de la expresidenta autonómica, Francina Armengol, pese a que se encuentra en el archipiélago.
La actual presidenta del Congreso había estado la tarde anterior en las medalla de la Reina junto a varios diputados del PSIB. Diversas fuentes destacan que sus dirigentes se muestran alicaídos y claramente preocupados por lo que se está conociendo.
Según el sumario del caso Koldo, la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) ha concluido que la adjudicación del contrato de mascarillas por valor de 3,7 millones de euros del Gobierno balear que presidía Francina Armengol a la trama fue "pre-concedida". Es decir; la entrega del material sanitario se produjo antes de que se formalizara contrato alguno.
Armengol se defiende
Desde el PP han pedido su dimisión como presidenta del Congreso porque "aceptó y pagó material sanitario defectuoso, aun sabiendo que no protegía de la covid y que ponía en riesgo la vida de quienes lo usaban". Una ofensiva que rechazan en el entorno de Armengol. "Las mascarillas no son fake", se defienden desde el entorno de la actual tercera autoridad del Estado, donde tratan de justificar su labor al frente del Ejecutivo balear.
Tras la adquisición, centenares de mascarillas se almacenaron por ser defectuosas, pese a que se hizo un escrito avalando su calidad. Tres años después, cuando iban a salir del Gobierno tras su derrota en las elecciones del pasado mes de mayo, interpusiesen una reclamación. "Las mascarillas simplemente no tienen calidad en algunos casos, en concreto en más de la mitad", aclaran algunos de los más cercanos a Armengol donde defienden que "lo que se hace es almacenarlas para reclamar la diferencia de dinero". Aunque este proceso tardó casi tres años.
El malestar en el entorno de Armengol es mayúsculo mientras tratan de desmarcarse del caso Koldo. "Nosotros no estamos en ninguna trama", aclaran y recuerdan que, de momento, no hay ninguna causa abierta contra Armengol. Para imputar a la tercera autoridad del Estado, algo inédito en la historia de España, sería necesario enviar un suplicatorio para derivar su causa al Supremo.
Ferraz cierra filas con Armengol
De momento, Ferraz cierra filas con Armengol y se escudan en ese expediente de reclamación que presentó mientras todavía era presidenta. Un argumento que comparten en su entorno. "¿Qué haces estando en una trama si analizas la calidad según te llegan? Si no hubiese habido reclamación, no habría almacenamiento y no habría queja de los corruptos", tercian fuentes próximas a la presidenta del Congreso mientras tratan de echar la culpa a la actual presidenta balear, Marga Prohens, a la que culpan de que haya "caducado" el expediente de reclamación que Armengol puso cuando estaba a punto de salir del Gobierno.
Aunque en Baleares consideran a la presidenta de las Cortes un auténtico "camaleón político", capaz de zafarse de todos los escándalos que la salpicaron siendo presidenta del gobierno balear (como el de las menores tuteladas o cuando se saltó el toque de queda para ir a tomar unas copas), empieza a cuajar la idea de que el caso Koldo acabe definitivamente con ella.


