
Pedro Sánchez mostró desde el inicio de 2019 un especial interés por mantener unas perfectas relaciones con el secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili. Le concedió una sede gratis por 75 años más 24,4 millones en reformas y, de inmediato el líder de la organización impulsó la sociedad Wakalua –de la mano de Globalia– que patrocinó el África Center de la mujer del presidente. Una persona fue clave en las gestiones entre el Gobierno y la OMT, especialmente en su plan de impulso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), justo el área en el que asesora Begoña Gómez. Esa persona era el entonces secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés.
Valdés fue imputado por su gestión en la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo en época de Rodríguez Zapatero. Y en abril de 2023 recibió la solicitud de procesamiento por esa misma actuación. Y ese mismo Valdés, en una entrevista concedida a eldiario.es el 28 de enero de 2022 defendió la necesidad del rescate de Globalia y la fusión con IAG, una operación difícil de explicar sin el rescate citado del Gobierno: un rescate que propició reuniones, antes y después de su definición, entre la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, el CEO de la compañía, Javier Hidalgo, y uno de los principales comisionistas de la trama Koldo, Víctor de Aldama.
Entrevista en eldiario.es
Pues bien, con esos antecedentes, Valdés concedió una entrevista el 28 de enero al citado diario. Y allí fue preguntado por el acuerdo de fusión que se negociaba por aquellas fechas entre Iberia y Air Europa: "¿Qué papel tiene el Ejecutivo en estas negociaciones?", le preguntó el periodista. El ya por entonces imputado señaló que había "un seguimiento casi diario. Es una operación importante para España. Puedo hablar en términos turísticos. Es especialmente importante para lo que comentaba, para España como destino turístico, porque necesitamos no sólo un 'hub' internacional, sino músculo para recibir turistas internacionales no intermediados, traerlos directamente de sus lugares de origen".
La entrevista le planteó los problemas que habían surgido en la fusión. Y es que IAG (Iberia) había dicho que Barajas, en caso de falta de acuerdo, podría tener un problema y quedarse rezagado respecto a otros aeropuertos europeos. La respuesta de Valdés fue inmediata: "Necesitamos una operación de esa naturaleza. Es bueno no sólo para el sector turístico, también para la movilidad internacional, para la capacidad de oferta educativa y formativa, para la actividad congresual o los viajes de negocios".
Rescate de Globalia
La entrevista también sacó a colación el rescate a Globalia, justo la operación en medio de la que más tarde se ha sabido que Begoña Gómez mantuvo reuniones con el CEO de Globalia (matriz de Air Europa), Javier Hidalgo, y el comisionista de la trama Koldo-PSOE. "La percepción para el Estado, para el Gobierno, es que esta es una operación estratégica para España. El fondo de Solvencia de la SEPI le ha prestado 475 millones de euros y la viabilidad de la empresa es necesaria para garantizar esta operación", señaló Valdés.
Todo ello, cuando también más tarde, se ha sabido que Valdés fue una persona de gran importancia en las inmejorables relaciones entre el Gobierno y la OMT, impulsora sin descanso de Begoña Gómez. Y es que Valdés quedó al corriente de infinidad de gestiones en materia de ayuda a la OMT y su plan de desarrollo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), justo el área en el que asesora Begoña Gómez.


