El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no asistirá este miércoles a la sesión de control en el Congreso por estar de viaje en Nueva York. Es la segunda vez que se ausenta en los tres Plenos que llevamos de curso político, coincidiendo la primera vez con su gira por China. En esta ocasión, la baja se produce después de un martes negro para el Ejecutivo, tanto por su debilidad parlamentaria, como por los casos de corrupción que afectan al presidente.
Una jornada que arrancaba con la decisión del Consejo de Ministros de retirar la senda de déficit, que se iba a votar el jueves en el Congreso, para evitar una nueva derrota parlamentaria a manos de sus socios de Junts. Apenas unas horas después saltaba la noticia de que la Audiencia Provincial de Madrid había dado orden de que el juez Peinado siga investigando a Begoña Gómez por el software de la Complutense, mientras la UCO registraba por tercera vez el despacho del hermano de Sánchez en la Diputación de Badajoz.
Este miércoles, el presidente se librará, gracias a sus giras internacionales, de tener que someterse a las preguntas de la oposición por la ristra de escándalos que asedian el Gobierno, y que el PP ha llegado a contabilizar en hasta 300: uno por cada día de los 300 que han transcurrido desde que fue elegido presidente, incluidos los conflictos diplomáticos que ha protagonizado con, por ejemplo, Venezuela.
Las faltas de miembros del Gobierno en las sesiones de control en el Congreso, y también en el Senado, donde sólo se ha sometido una vez al control de la Cámara en toda la legislatura, motivaron ayer la queja del portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado. El diputado remitió un escrito a la Mesa del Parlamento para que los ministros justifiquen debidamente sus ausencias, dado que en algunos casos, como el de la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera, o el de Exteriores, José Manuel Albares, han cursado baja en más de un 50% de los Plenos, siendo habitual que en cada sesión falten seis o siete ministros.
"El Gobierno se ha declarado en rebeldía", criticó con dureza Tellado, que reprochó a Sánchez "faltar al respeto al poder Legislativo". "Los ministros se inventan la agenda para no asistir a los Plenos", denunció ante sus faltas en las sesiones de control donde, cuando asisten, esquivan a menudo las preguntas de la oposición para no dar explicaciones sobre ninguno de los frentes que tienen abiertos.
Los desprecios de Sánchez al Parlamento se vienen produciendo ya desde la anterior legislatura pero nunca, hasta ahora, el presidente había proclamado que gobernaría, incluso, de espaldas a las Cortes, dadas las derrotas que viene sufriendo. Una decisión que se completa con su plan contra medios y jueces, en pleno cerco por la corrupción, así como la convocatoria del Congreso del PSOE para acallar a las escasas voces críticas que cuestionan el cupo catalán.