
Sumar justificaba su silencio alegando que no era apropiado pronunciarse sobre la delicada situación de su socio en el Ejecutivo en torno al caso Leire Díez. No obstante, fuentes de la formación admitían su "preocupación". "Sobre conversaciones privadas, de verdad, no hago comentarios", zanjaba al inicio de la semana la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.
El socio minoritario pasó de mantenerse al margen e incluso salir en defensa del PSOE, como hizo Yolanda Díaz durante la sesión de control al Gobierno, cuando se vio acorralada por las preguntas del Partido Popular, a elevar el tono y exigir a Pedro Sánchez medidas "contundentes". Lo que inicialmente calificaron como mera "rumología" dio paso a una postura crítica, aunque sin llegar al desafío abierto, ya que su continuidad en el Ejecutivo no está en cuestión. Una actitud que comparten con el resto de aliados parlamentarios, como ERC o Podemos, que han optado por cerrar filas e ironizar sobre la propuesta de Alberto Núñez Feijóo de apoyar su moción de investidura "por coherencia" contra la corrupción.
La estrategia de Sumar ha evolucionado con el paso de los días. Del silencio y la cautela iniciales han pasado a calificar de "gravísimos" los audios y las informaciones que salpican al PSOE. Fuentes de la formación confían en que el cerco que rodea a Pedro Sánchez "no les va a salpicar" y esperan que la polémica se disipe cuanto antes, con el objetivo de centrarse en un escenario preelectoral que tiene a Andalucía como punto de partida. Un contexto especialmente complejo para las fuerzas a la izquierda del PSOE, lastradas por su fragmentación, y que podría actuar como preludio de unas futuras elecciones generales.
Sumar intenta recuperar impulso con su gira por España para promover la reducción de la jornada laboral. Sin embargo, el impacto del aumento del gasto en defensa y la continuidad de los contratos del Gobierno con Israel ha sido considerable, ya que representa una "línea roja" para el socio minoritario del Ejecutivo. Mientras tanto, tratan de pasar página y minimizar el efecto de la operación impulsada desde Ferraz para ofrecer beneficios judiciales a cambio de información.

