Libertad Digital ha tenido acceso al archivo central desde el que trabajaba la cloaca. Allí se pueden observar dossiers, investigaciones y seguimientos a la UCO, la juez Biedma –instructora del caso del hermano de Pedro Sánchez–, el juez Peinado –instructor del caso de la mujer de Pedro Sánchez–, el fiscal jefe anticorrupción Luzón –el que ha avalado la colaboración de Víctor de Aldama para que aporte pruebas sobre los casos de corrupción que cercan al Gobierno de Pedro Sánchez–, etc.
Pero hay una carpeta especial llamativa por la implicación del Gobierno que puede suponer. Ya se sabe que en la reunión impulsora de la cloaca estuvo el secretario de organización de Sánchez en el PSOE y dos altos cargos más del partido del presidente del Gobierno.
Pero ahora, gracias a los archivos que ha desvelado Libertad Digital se puede observar que también existe documentación de una operación: la del bulo divulgado por el Gobierno afirmando que la UCO preparaba un atentado con bomba lapa contra Sánchez. Semejante bulo –demostrado hasta el punto de que el chat en el que se suponía que se apoyaba esa barbaridad estaba manipulado y cortado y se conoce la conversación real original y no dice nada ni parecido– se simuló en base a un chat entre un confidente, Caramés, y un entonces capitán de la UCO, Bonilla (que usaba el apodo de Roberto Alcázar).
Pues bien, las conversaciones originales figuran en la documentación de la cloaca con fecha previa a su uso como bulo por el Gobierno: figuran en un archivo de noviembre de 2024 y el bulo se ha lanzado hace unas semanas. Lo que prueba que la cloaca del PSOE tenía las conversaciones: las buenas, las reales. Y luego, meses después, divulgó las falsas y manipuladas.
El archivo que desmonta el bulo del Gobierno
El archivo en cuestión es el siguiente: "Conversación Caramés - Roberto Alcázar (669134546).pdf". Su fecha de "última modificación": "13 nov 2024". Y el tamaño: "193,3 MB". Se trata de un PDF, por lo que es texto escrito: la conversación mantenido en el chat. Y alude a esa charla entre el confidente Caramés y el capitán Bonilla que usaba de seudónimo el de Roberto Alcázar.
Pues bien, ese documento acredita que la cloaca de la mano derecha de Santos Cerdán –a su vez mano derecha de Sánchez– disponía de la conversación real que luego su propio Gobierno divulgó manipulada y cortada.
Hay que recordar cómo surgió y se usó ese bulo. En medio del escándalo en torno al Gobierno de Pedro Sánchez, los audios de la fontanera Leire Díez prometiendo trato de favor a empresarios a cambio de información sobre la cúpula de la UCO, el Gobierno divulgó unos whatsapps que el ya excapitán de la UCO Juan Vicente Bonilla intercambió con un confidente en 2021.
Unos de los extractos manipulados y divulgados acusaban a Bonilla de ser partidario de la violencia, atribuyéndole la frase "O una bomba lapa en los bajos" (…) "algún sicario venezolano" con la interpretación de que proponía un ataque contra el presidente del Gobierno. En las explicaciones del Gobierno de Sánchez se aprovechó para cargar contra Isabel Díaz Ayuso por el hecho de que Bonilla ocupa ahora el cargo de gerente de seguridad corporativa del Servicio Madrileño de Salud.
Todo un abanico de documentos
Pues bien, todo era mentira. Se habían borrado tres mensajes intermedios en los que se veía que la historia era justo al revés: era el UCO el que decía, en tono coloquial, que a saber si no les ponían a ellos una bomba por hacer su deber. Libertad Digital ha accedido al archivo central de la cloaca. Y allí está la conversación. Se trata de documento matriz ubicado en un drive de Google. Allí figuran las distintas carpetas de actuación, investigación o seguimiento de la cloaca a jueces, fiscales, UCO, periodistas, con el responsable de la trama asignado a cada trabajo. Dos nombres destacan por encima del resto. Y uno de ellos, obviamente, es el de Leire Díez.
La cascada de documentos es notable: archivos sobre la UCO, sobre policías, sobre el fiscal jefe anticorrupción Luzón, sobre Grinda, sobre el juez Peinado, la juez Biedma… Todo un abanico de actuaciones con las que, después, maniobraban para sacar de la carrera judicial, fiscal o policial a personas relacionadas, de una u otra manera con los intereses del PSOE.