Menú

Puigdemont culpa a Franco, al PP y al Gobierno alemán de que el catalán no sea oficial en la UE

El líder separatista se felicita por haber forzado al "Reino de España" a que en el Congreso se hable catalán y a pedir su oficialidad en Europa.

El líder separatista se felicita por haber forzado al "Reino de España" a que en el Congreso se hable catalán y a pedir su oficialidad en Europa.
El expresidente de la Generalidad fugado, Carles Puigdemont durante una conferencia en Prada. | EFE

El expresidente de la Generalidad prófugo, Carles Puigdemont, ha señalado al PP y al Gobierno de Alemania como culpables de que no haya prosperado la iniciativa del "Reino de España" (según ha recalcado) para que el catalán sea oficial en la Unión Europea. Puigdemont ha hecho esas acusaciones en el curso de una conferencia en la "Universitat Catalana d'Estiu" que se celebra en la localidad francesa de Prades, Prada de Conflent en la toponimia catalanista.

El líder de Junts no ha defraudado a sus partidarios, aunque no ha avanzado ninguna novedad en relación a los tratos con el Gobierno de Pedro Sánchez y la posición del partido independentista en el Congreso de los Diputados. Puigdemont estaba invitado para pronunciar una conferencia sobre Pompeu Fabra, el padre de la gramática catalana, cuyo desarrollo le ha llevado por derroteros tan pintorescos como el franquismo o la Alemania nazi.

La intención de Puigdemont era la de presumir ante un público concienciado de las conquistas de Junts en términos lingüísticos frente a la malvada Castilla. Todo el discurso del líder golpista ha girado en torno a la lengua. "Cincuenta años después de la muerte de Franco nadie saldrá a pedir perdón en nombre del Estado a los millones de personas a las que se arrancó una parte de su identidad y que fueron vejadas y escarnecidas por los poderes públicos por hablar una lengua no castellana", ha afirmado al comienzo de su intervención.

La culpa, de Franco

Puigdemont ha hecho de la defensa del catalán y de la inmigración los puntos sustantivos de su intervención. El diagnóstico es que el catalán está en riesgo, a punto de desaparecer. Franco primero y la demografía después han conducido al idioma catalán a un precipicio. Que dirigentes de Podemos y Sumar se hayan mostrado contrarios a la cesión de las competencias de inmigración a la Generalidad (pactada por Santos Cerdán y José Luis Rodríguez Zapatero con Puigdemont en Suiza) es una de las causas de que se esté perdiendo la "batalla de la lengua", tal como la denomina el prófugo más famoso de España. Cataluña necesita esas competencias para evitar la desaparición de la lengua, ha advertido en varias ocasiones.

En la perspectiva de Puigdemont, "tenemos un régimen jurídico en el que el castellano es la única lengua obligatoria" y "el derecho a usar la lengua catalana queda como un derecho muy condicionado y cada vez más relacionado con la administración".

La España del Rey, Marchena y Podemos

Como suele ser habitual en las intervenciones de Puigdemont, el Rey ha salido a colación en un par de ocasiones, así como el juez del Tribunal Supremo que juzgó a los golpistas, Manuel Marchena. Ha sido en el pasaje en el que ha hablado sobre la catalanofobia en el tono victimista habitual. Puigdemont ha llegado a referirse a una heladería de Barcelona que está siendo sometida al acoso del separatismo por no haber atendido en catalán a la pareja de un concejal de ERC y al futbolista andaluz que ha sido descartado por el Gimnástico de Tarragona por haber dicho "me cago en los muertos de todos los catalanes", expresión por la que ha pedido perdón en numerosas ocasiones.

Además, ha equiparado a PP y Vox con el presidente de la Generalidad, Salvador Illa, al referirse a la "agenda desnacionalizadora que lidera el presidente de la Generalidad y la hostilidad explícita del PP y de Vox, que continúan haciendo de la catalanofobia uno de sus argumentos electorales".

Acto seguido ha sacado pecho de que se puede hablar en catalán en el Congreso y de que "el Reino de España haya llevado a la UE la oficialidad del catalán". Esa es una de las condiciones que Puigdemont exigió para investir a Sánchez y que más satisfacción le proporciona a pesar de los constantes fracasos del titular de Exteriores, José Manuel Albares. Pero a Puigdemont le hace gracia que un ministro español sea el encargado de defender el catalán en la UE.

"La victoria de Franco sobre nuestra lengua"

La teoría de Puigdemont es que el franquismo impidió la consolidación del catalán y que "impedir la oficialidad que el catalán debería tener en la UE es perpetuar la victoria de Franco sobre nuestra lengua". Pero no acaba ahí la cosa: "Si eso ya es lamentable de por sí, todavía lo es más si quienes contribuyen a bloquearlo son los herederos políticos de aquel régimen con la ayuda del Gobierno de un país que prestó un apoyo decisivo para la victoria del fascismo español sobre la república española y sobre Cataluña". Puigdemont se refería a Alemania, país en el que estuvo preso dos semanas y retenido seis meses antes de regresar a la seguridad de Bélgica.

Según Puigdemont, el PP contactó con el Gobierno alemán y con otros de su misma cuerda para decirles algo así como "haced el favor de tocar los huevos a mi Gobierno, al reino de España, porque esto que viene no me gusta", en alusión a la petición de Sánchez de que el catalán sea oficial en Europa.

"Sánchez no está pasando por su mejor momento"

Preguntado sobre las posibilidades de que el Gobierno de Pedro Sánchez logre la oficialidad del catalán, Puigdemont ha asegurado que "España es un país importante. Cuando ha querido nombrar una alta responsable de la comisión europea lo ha hecho. Es verdad que Pedro Sánchez no está pasando ahora por su mejor momento, pero el Estado español es una economía próspera dentro de la Unión Europea. Es un socio que cuenta mucho, no es un socio menor".

Temas

En España

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Curso
    • Inversión
    • Securitas
    • Buena Vida
    • Reloj Durcal