
María Corina Machado no asistió a la ceremonia de entrega del premio Nobel de la Paz, pero estaba de camino al país europeo. Un trayecto en el que empleó muchas horas ya que se desplazó tanto en barco como en avión y finalmente pudo abrazar a su familia después de 16 meses. "Gracias a todos los hombres y mujeres que han arriesgado su vida para que yo pueda estar aquí. Ha sido una experiencia, pero merece la pena estar aquí", ha manifestado ella misma ante los medios de comunicación.
Machado aterrizó en el aeropuerto de Gardermoen, en el municipio de Ullensaker pocos minutos antes de las diez de la noche del miércoles 10 de diciembre – sobre las 21:58 – después de un largo viaje desde Venezuela, donde vive en la clandestinidad. Corina Machado salió del país en barco este martes 9 de diciembre hacia Curazao, una de las islas de los Países Bajos en el mar Caribe, situada solo 65 kilómetros de la costa de Venezuela.
The Wall Street Journal ha contado algunos de los detalles del plan para la salida en barco. Machado se disfrazó y logró pasar inadvertida en diez controles militares hasta llegar a un pequeño puerto pesquero, donde utilizó una embarcación de madera para la huida. El plan fue minuciosamente diseñado durante dos meses, según el mismo diario, y habría contado con el respaldo estadounidense. La propia Machado ha aludido a las dificultades, sin dar detalles, y ha confirmado el apoyo del gobierno estadounidense en su rueda de prensa desde Oslo.
Desde Curaçao, Machado voló a Oslo en un avión privado, un Legacy 600 del fabricante brasileño Embraer, haciendo escala en Estados Unidos.
Casi once horas de vuelo con escalas
Para recoger a Machado, la aeronave partió del Aeropuerto Ejecutivo de Miami Opa Locka, en el estado de Florida – EEUU – con destino al Aeropuerto Internacional Hato de Willemstad, capital de Curazao. El avión, con capacidad para 13 pasajeros, está matriculado en México, tiene como base el Aeropuerto Internacional Santiago de Querétaro y es operado por la compañía JetVip Business Aviation.
El avión partió a las 6:42 hora local – 10:42 GMT – de este miércoles 10 de diciembre y tras un vuelo de cuatro horas y 43 minutos aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Bangor, situado en el estado de Maine (EE.UU.), donde hizo una escala técnica. La última parte del viaje, un vuelo de seis horas y 24 minutos desde Bangor hasta el aeropuerto de Oslo Gardermoen, concluyó cerca de la medianoche en la capital noruega.

