Por mucho que se mire, el desastre ocasionado por el ciclón Daniel es inimaginable. Poco a poco el agua vuelve a su cauce, pero el domingo corrió durante 40 minutos con una altura de un cuarto piso. Así que mucha gente que se refugió en las primeras plantas murió ahogada.
El problema ahora es recuperar sus cuerpos bajo toneladas de barro con unas infraestructuras destrozadas y sin medios. Libia, un Estado fallido y dividido que hoy, por no tener, ya no tiene ni bolsas para tanto cadáver. Una tragedia con epicentro en Derna, pero que también ha asolado otras ciudades como El Wardia, que hoy es una localidad fantasma.