
El principal indicador bursátil de nuestro país, el Ibex 35, está en máximos históricos y cierra en los 16.000 puntos. De este modo, en una sesión marcada por el acercamiento comercial entre EE. UU. y China, el indicador bursátil ha alcanzando los 15.994,2 puntos al cierre de la sesión de este lunes.
Hasta ahora, cabe destacar que el mayor cierre de la historia del Ibex se firmó el 8 de noviembre de 2007 en los 15.945,7 puntos, umbral que ha llegado a superar el indicador en la sesión de hoy. Asimismo, el máximo intradía del Ibex 35 se registró también el 8 de noviembre de 2007, con una cotización del 16.040,4 puntos.
Así las cosas, en lo que va de año, el Ibex 35 ha ganado más de un 37%, siendo la bolsa occidental más alcista. A la española le siguen las bolsas de Milán y Fráncfort, con avances de un 25% y un 21% en lo que va de año, respectivamente. De hecho, el Ibex 35 supera también a Wall Street, donde el Nasdaq ha ganado un 20% este año, el S&P 500 avanza un 15% y el Dow Jones casi un 11%.
Ibex, ¿con o sin dividendos?
Estos máximos, sin embargo, no reflejan el valor real de nuestro mercado, simplemente reflejan la evolución bursátil de la capitalización de las compañías que durante estos últimos años han formado parte del Ibex, pero no han contemplado una parte muy importante de la generación de riqueza de las empresas, que son los dividendos que reparten.
Cuando uno invierte en un fondo de gestión pasiva que replica el Ibex 35, digamos que es titular de una parte proporcional de cada una de las compañías que componen ese índice. Y, como propietario de esa parte proporcional de acciones, también tienes el derecho de cobrar los dividendos que estas compañías generan. Y se da el caso que el indicador español es uno de los indicadores que no contempla estos beneficios repartidos entre los accionistas en forma de dividendos.
Así, pudiera parecer que si alguien invirtió, por ejemplo, 1.000 euros el 8 de noviembre de 2007, hasta hoy no los habría recuperado, 18 años después. Sin embargo, lo cierto es que pese a que nuestro indicador atravesó, como toda la economía, una terrible peregrinación por el desierto durante los años siguientes al estallido de la burbuja inmobiliaria y la posterior crisis financiera, recuperó el nivel de aquel 8 de noviembre de 2007 en noviembre de 2014.
Si tenemos en cuenta el Ibex con dividendos, el 8 de noviembre de 2007 cuando nuestro índice cerró su máximo histórico anterior por encima de los 15.900 puntos, en ese momento, con dividendos sumaba unos 25.300 puntos. Un nivel, el de los 25.300 que volvió a tocar en noviembre de 2014, siete años después. Desde entonces ha llaneado hasta 2022, cuando inició un rally alcista que le ha conducido actualmente a los 57.401 puntos. Es decir, que desde aquel famoso 8 de noviembre de 2007 hasta hoy, el inversor en Ibex ha multiplicado por más de dos veces su inversión.
Contexto internacional
El contexto internacional está dominado ahora mismo por los movimientos de EE. UU. en materia comercial. En concreto, en las últimas horas se ha producido un acercamiento de posiciones entre EE. UU. y China que podría evitar la imposición de aranceles adicionales del 100% a los productos chinos. Además, EE. UU. está negociando también con Brasil, Tailandia, Camboya y Malasia.
No obstante, la política monetaria también es un elemento importante en los mercados. Tras publicarse los datos del IPC de septiembre en EE. UU., que han sido más bajos de lo esperado, se anticipan dos reducciones de tipos adicionales antes de año por parte de la Fed.

