La Línea 6 de Metro de Madrid, el anillo que vertebra el transporte subterráneo de la capital, se prepara para un cambio sin precedentes. El próximo 31 de mayo arrancan las obras para su automatización, un proyecto que convertirá a la emblemática Circular en la primera línea de conducción automática sin maquinistas de toda la red del suburbano, y que culminarán en 2027.
La automatización, sin embargo, no llega sin sacrificios. "Disculpas y mucha paciencia", ha pedido a los más de 400.000 viajeros diarios de la línea el consejero delegado de Metro de Madrid, Ignacio Vázquez Casavilla, en la presentación del nuevo modelo, a la que también acudieron el director de explotación de Metro, Juan Tébar Molinero, y el director de planificación estratégica y explotación del CTMR, Francisco Javier Gómez. Según han explicado, el primer tramo afectado por los trabajos será el arco oeste de la Línea 6, que conecta Moncloa con Méndez Álvaro, que suspenderá el servicio entre ambas estaciones desde el 31 de mayo hasta el 12 de septiembre. A partir de esa fecha, el cierre se trasladará al arco este, entre Moncloa y Legazpi, hasta el 31 de diciembre. Durante estos nueve meses, de las 28 estaciones que la componen, la de Arganzuela-Planetario será la única que cerrará por completo, ya que funcionará como centro de coordinación de las labores previstas.
Las obras, que ya se han iniciado en la fase previa —motivo por el cual se ha adelantado el cierre de la línea a las 00:00 horas de domingo a jueves—, cuentan con una inversión de 168,5 millones de euros e incluirán también la renovación de las vías, con entre 30 y 40 años de antigüedad; la optimización del trazado; la modernización del carril; la instalación de estructuras para puertas de andén; nueva señalización; y la construcción de nuevas escaleras de evacuación de peldaños, para garantizar que la salida en caso de emergencia sea más rápida al ser un tren sin conductor y más pasajeros.
Se trata de un proyecto sin precedentes a nivel nacional y mundial ya que "nunca se ha transformado una línea manual a automática" en apenas siete meses, ha subrayado Vázquez. Sin embargo, asegura "no hay más planes de automatización" en el resto de líneas del suburbano madrileño, por ser la explotación manual "la prioritaria".
🔴 Cierres en la Línea 6 de Metro desde el 31 de mayo para convertirse en la primera línea automatizada en 2027 pic.twitter.com/xobvRtsd4f
— Libertad Digital (@libertaddigital) May 12, 2025
Servicios gratuitos complementarios
Para minimizar las molestias en una línea con "niveles históricos de demanda" —116 millones de usuarios el pasado año—, la Comunidad de Madrid ha diseñado un plan alternativo de transporte que incluye un servicio de autobuses gratuito operado por la EMT —el SE6—, con una frecuencia de entre 3 y 5 minutos, por el mismo recorrido que haría la L6 y efectuando una parada en Usera (zona comercial de la Calle Marcelo). Además, estos autobuses se reforzarán con lanzaderas para conectar Batán con Lucero y Legazpi con Plaza Elíptica. Esta última, en ambos sentidos, circulará por la calle Antonio López y efectuará una parada a la altura del centro comercial Plaza Río 2.
Además, se ampliará el recorrido de la línea 180 de EMT, que unirá de forma gratuita Legazpi con Arganzuela-Planetario. En Puerta del Ángel y Ciudad Universitaria, se habilitarán aparcamientos disuasorios de pago. Todo un plan, explican los responsables del suburbano, diseñado tras recabar la opinión de más de 10.000 usuarios, con el fin de ajustar las alternativas a sus necesidades reales. Además, Metro de Madrid pondrá a disposición de los ciudadanos una plataforma través de su aplicación móvil para facilitar la planificación y el cálculo de trayectos y consultar las alternativas de transporte disponibles.
En cuanto al mantenimiento del empleo de los maquinistas que dejarán de encabezar los nuevos trenes, el CEO de Metro insiste en que "está garantizado": más de 170 de los 190 maquinistas afectados serán reubicados en otras líneas, al igual que los trenes que se liberarán, que pasarán en su mayoría a operar en la L9.
Se espera así que la nueva L6 vea la luz al completo el 1 de enero de 2026, momento en el que se dará inicio a la instalación de las mencionadas puertas de andén —una especie de "mamparas de seguridad"— para los nuevos trenes automáticos, que ya están siendo fabricados por CAF. Habrá un periodo de transición en el que las puertas de andén convivirán con los trenes antiguos, lo que ha obligado a fabricar los nuevos convoyes con las puertas en el mismo lugar exacto que los actuales para garantizar la compatibilidad.
Con la instalación de las puertas, llegarán los nuevos trenes, "que entrarán todos de golpe en 2027", dice Vázquez. Serán cuarenta nuevos más ocho existentes que son compatibles, y aumentarán su capacidad en un 70% durante las horas punta, permitiendo un tren hasta cada dos minutos y un 18% más de espacio por vagón. Una frecuencia que, según Metro de Madrid, será posible gracias a la renovación de los raíles que permitirá reducir las incidencias.