
El PSOE-M ha comenzado el curso en la Asamblea de Madrid faltando a la verdad. Todos los esfuerzos de su portavoz parlamentaria, Mar Espinar, han ido encaminados a vender las bondades de la condonación de la deuda a las comunidades autónomas y a arremeter contra el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso por oponerse frontalmente a esta medida pactada entre el PSOE y ERC a cambio de la investidura de Pedro Sánchez.
"¿Por qué es tan importante para nosotros que Ayuso acepte esto? Porque queremos que invierta en servicios públicos", afirmó la portavoz socialista. "Así de sencillo", dijo. "Porque lo que los socialistas queremos es que el dinero de los madrileños se vea que se invierte para mejorar la vida de los madrileños", remachó.
De esta manera, tiraba del argumentario puesto el lunes en circulación por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y recogido también ayer martes por la propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que celebró que las CCAA podrán usar el ahorro de los intereses tras la quita de deuda en gasto social (entre 6.600 y 6.700 millones de euros, según sus cálculos).
Sin embargo, el propio documento de Hacienda que explica el llamado Anteproyecto de ley orgánica de medidas excepcionales de sostenibilidad financiera para las comunidades autónomas de régimen común asegura que con la quita "se persigue evitar la aparición de problemas de riesgo moral" con "la aplicación del artículo 12 de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, que impide que el ahorro de intereses producido por la reducción de deuda de las Comunidades Autónomas pueda ser empleado en incrementar su gasto". El texto fue elaborado el pasado mayo, pero Montero no expuso cambios al explicar la norma este martes.
La Airef también desmintió que el ahorro de intereses se pueda usar para educación o sanidad, como insistió este miércoles el PSOE de Madrid. "La condonación supondrá un ahorro en intereses que implica una reducción del déficit de las CCAA y un incremento en la Administración Central. No obstante, hay que considerar que los intereses no se incluyen en el cálculo de gasto computable a efectos de la regla de gasto. En consecuencia, este ahorro no modifica el cálculo de la regla de gasto y, por lo tanto, no genera un mayor margen de gasto en otras políticas públicas", publicó el organismo en una nota de febrero.
Así se lo recordó después el portavoz del PP en la Asamblea. "Ya ha dejado claro la Airef que esta falsa condonación de la deuda en Madrid no permitiría hacer gasto nuevo; es decir, que lo que están diciendo a educación y sanidad es mentira, lo prohíbe la propia norma", señaló Carlos Díaz Pache, que lamentó que "ningún socialista ni miembro de la izquierda" en la región haya explicado esta cuestión "sin mentir". "Lo que nunca explica la izquierda es qué ocurre con la deuda que se condona. Esta deuda no desaparece, la pagan todos los españoles con su dinero".
"Los madrileños tienen que saber que esto es un engaño, una trampa y una estafa del Gobierno de Pedro Sánchez, que nos quiere aumentar una deuda para contentar a sus socios", afirmó rotundo el portavoz parlamentario de los populares. Y es que "si aceptásemos esta quita de la deuda que proponen, cada catalán debería 410 euros menos y cada madrileño debería 483 euros más".
Así, subrayó que es un "negocio ruinoso" para los madrileños y que sólo sirve "para contentar a sus socios, a los que le mantienen artificialmente en la Moncloa": "Quiere quitarnos una deuda de 8.000 millones que tenemos en los mercados para incorporarnos una nueva deuda de 12.000 millones con el Estado". Y es que Madrid "ya se financia íntegramente en los mercados, no necesita de la financiación del Estado. Es una región solvente y no necesita esa falsa ayuda del Estado". Lo que reclaman los populares madrileños es "un nuevo sistema de financiación acordado por todos y no negociado solo con los independentistas catalanes a espaldas del resto de las regiones".
Por su parte, el Gobierno de Ayuso, en boca de su portavoz, anunció que van a "llegar hasta el final" para evitar esta "barbaridad", que implica "un paso más hacia la ruptura de nuestro país, que es lo que buscan los partidos independentistas y que el gobierno de Pedro Sánchez está dispuesto a dar a cambio de los votos que necesita para permanecer en la Moncloa". Así, confirmó que presentarán alegaciones a este proyecto de ley cuando se abra el periodo de audiencia pública.
Además, Miguel Ángel García Martín lamentó que el Ministerio de Hacienda aun no les ha comunicado la fecha para el Consejo de Política Fiscal y Financiera, previsto para este mes de septiembre. "De hecho, en julio tenía que haber habido un Consejo de Política Fiscal y Financiera. Entiendo que el Gobierno central ha estado más preocupado de ver cómo articulaba este peaje a los partidos independentistas, pero es que lo que toca, efectivamente, como decíamos la semana pasada, es hablar de un nuevo sistema de financiación que lleva 10 años caducado para todas las comunidades autónomas sin excepción y que se negocia, lógicamente, en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera".
"Una trampa para dividir a las CCAA" del PP
Desde el equipo de la presidenta alertaron este martes que la condonación de deuda que presentan como algo que beneficia a todas las comunidades autónomas es, en realidad, una "trampa que pretende dividir" a las comunidades gobernadas por el PP, con el señuelo de asumir parte de su deuda. "Lo necesario – subrayaron - es un nuevo sistema de financiación autonómica que permita a todas las regiones disponer de la financiación que necesitan para sus servicios públicos".
En este sentido, afirmaron que "Cataluña no está en absoluto infrafinanciada. Su deuda es la mayor de todas las regiones españolas, y se ha producido por sus políticas irresponsables de gasto, el reiterado incumplimiento de los objetivos de estabilidad y el delirio independentista". Por contra, Madrid es la comunidad "más solidaria": aporta el 75% del Fondo de Garantía, pero "no estamos dispuestos a pagar a escote el despilfarro del independentismo catalán ni la nueva embajada que Illa ha abierto en China".
Y subrayaron que "no es cierto" que la condonación suponga que las CCAA vayan a tener más dinero para el gasto social porque tanto la Airef como el texto del propio anteproyecto de Ley dicen "claramente" que el ahorro producido en las CCAA por la reducción de deuda no podrá ser utilizado en incrementar su gasto. "Si Madrid aceptara la quita, no son 8.000 millones que nos entregan para invertir, como dice el PSOE. Sería un ahorro por los intereses de la deuda de 196 millones al año que no se pueden destinar a políticas sociales. Simplemente, se ahorrarían. Y, a cambio, los madrileños pagarían más impuestos para resolver la deuda de los demás", añadieron ya este miércoles.

