
LD (Agencias) Un coche-bomba ha explotado en Kabul a unos cien metros del protegido complejo de la embajada de EEUU. El suceso ha sido obra de un terrorista suicida y ha causado la muerte de dos soldados estadounidenses. Hay otros cinco extranjeros fallecidos. En total, según las autoriodades locales, son dieciocho las víctimas mortales.
Un comunicado de la coalición militar dirigida por EEUU sólo indicó que el ataque provocó "bajas en la coalición", pero sin dar apenas detalles. Según la nota, el objetivo del atentando era un convoy militar de la coalición que circulaba cerca de la legación estadounidense. Dos soldados estadounidenses han fallecido a causa del atentado, según el portavoz del ejército de EEUU, el comandante de EEUU Thomas Collins.
Este atentado sigue al del lunes pasado, cuando un ataque suicida contra un convoy de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) provocó cuatro muertos, entre ellas un soldado británico, y once heridos.
Minutos antes, en la ciudad de Kandahar, al sur del país, otro coche-bomba explotaba matando al terrorista que lo conducía. Según las autoridades, el automóvil estallaba por error cuando circulaba por una de las principales vías de la ciudad y cerca de la mayor base que la Organización del Tratado del Atlántico Norte tiene en la ciudad. En el incidente no se registraron heridos, aunque sí que se produjeron importantes daños materiales, sobre todo en los vehículos de la OTAN aparcados en la zona.
Kabul era hasta ahora una de las ciudades más seguras del país y donde hay mayor control policial y militar, por lo que no eran frecuentes los ataques suicidas. Los actos violentos no dejan de repetirse prácticamente cada día en Afganistán, que está viviendo uno de los periodos más sangrientos desde la caída del régimen talibán a finales del 2001.
