LD (Agencias) Según medios locales, al menos un policía murió en los violentos disturbios y decenas de personas resultaron heridas, varias de ellas de carácter muy grave. Por su parte, la agencia rusa Itar-Tass informó de que los manifestantes se apoderaron de un camión y lo lanzaron contra una unidad policial, que puede haber perdido a un hombre, aunque la noticia no ha sido confirmada por el ministerio del Interior azerbaiyano.
Según los medios de prensa locales, los enfrentamientos son muy virulentos en las calles aledañas a la sede de Musavat, que ha sido acordonada por cientos de policías antidisturbios armados con barras y escudos. La agencia de noticias rusa Interfax señaló que cerca de 3.000 militantes y seguidores de Musavat rompieron los cordones de Policía y se lanzaron hacia la plaza de Azadlir (plaza de la Libertad) destrozando a su paso escaparates, vehículos y mobiliario urbano al grito de "Allah Akbar" (Dios es grande). Los agentes dispersaron a varios centenares de manifestantes con vehículos antidisturbios dotados de cañones de agua y rodeó la plaza de la Libertad para impedir la llegada al centro de la ciudad del grueso de la manifestación.
La holgada victoria del jefe de Gobierno, hijo del presidente saliente azerbaiyano, Heidar Alíev, derivó en las masivas protestas callejeras, mientras los observadores internacionales denunciaron irregularidades en los comicios. Según datos suministrados por la Comisión Electoral Central, con el 91 por ciento de los votos escrutados Alíev obtuvo el 79,5 por ciento. En segundo lugar se colocó con un 12,6 por ciento el líder del partido nacionalista opositor Musavat, Isá Gambar, cuyos seguidores encabezan las manifestaciones que han tomado el centro de Bakú.
En una rueda de prensa celebrada en Bakú, la Organización para la Cooperación y Seguridad en Europa habló de la "oportunidad perdida" con estos comicios, que, según el organismo, no han alcanzado los estándares democráticos internacionales. Según Giovanni Kessler, representante de la OSCE, hubo numerosas irregularidades y presiones sobre algunos candidatos, e incluso agresiones físicas por parte de la policía a miembros de la oposición.
Según los medios de prensa locales, los enfrentamientos son muy virulentos en las calles aledañas a la sede de Musavat, que ha sido acordonada por cientos de policías antidisturbios armados con barras y escudos. La agencia de noticias rusa Interfax señaló que cerca de 3.000 militantes y seguidores de Musavat rompieron los cordones de Policía y se lanzaron hacia la plaza de Azadlir (plaza de la Libertad) destrozando a su paso escaparates, vehículos y mobiliario urbano al grito de "Allah Akbar" (Dios es grande). Los agentes dispersaron a varios centenares de manifestantes con vehículos antidisturbios dotados de cañones de agua y rodeó la plaza de la Libertad para impedir la llegada al centro de la ciudad del grueso de la manifestación.
La holgada victoria del jefe de Gobierno, hijo del presidente saliente azerbaiyano, Heidar Alíev, derivó en las masivas protestas callejeras, mientras los observadores internacionales denunciaron irregularidades en los comicios. Según datos suministrados por la Comisión Electoral Central, con el 91 por ciento de los votos escrutados Alíev obtuvo el 79,5 por ciento. En segundo lugar se colocó con un 12,6 por ciento el líder del partido nacionalista opositor Musavat, Isá Gambar, cuyos seguidores encabezan las manifestaciones que han tomado el centro de Bakú.
En una rueda de prensa celebrada en Bakú, la Organización para la Cooperación y Seguridad en Europa habló de la "oportunidad perdida" con estos comicios, que, según el organismo, no han alcanzado los estándares democráticos internacionales. Según Giovanni Kessler, representante de la OSCE, hubo numerosas irregularidades y presiones sobre algunos candidatos, e incluso agresiones físicas por parte de la policía a miembros de la oposición.