L D (EFE) El portavoz de ese organismo en Ginebra, Damien Personnaz, ha declinado facilitar la identidad de la víctima, pero aseguró que su familia ya ha sido contactada por UNICEF (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia). Personnaz también ha explicado que todo apunta a que el móvil del ataque fue el robo del vehículo en el que la trabajadora de la ONU se desplazaba por la zona oriental de Chad, próxima a la región sudanesa de Darfur, escenario de un conflicto armado y de una grave crisis humanitaria.
"No creemos que se trate de un atentado dirigido contra UNICEF o la ONU, sino de bandidos", ha dicho. Los ladrones dispararon a poca distancia contra la empleada española cuando ésta se encontraba en las inmediaciones de la localidad de Abeche y huyeron con el jeep, dejándola herida. Posteriormente, fue trasladada a la capital Yamena, donde recibe atención médica hasta que pueda ser trasladada a París.
Personnaz ha señalado que ataques contra personal de la ONU no se habían registrado antes en esa región chadiana, pero recalcó que este episodio deja en claro la necesidad de que las autoridades garanticen la seguridad de las organizaciones humanitarias que trabajan en el terreno. En los últimos meses, los robos a mano armada de vehículos de entidades humanitarias se han incrementado en la zona y han profundizado el sentimiento de inseguridad.
Alrededor de 70 empleados internacionales de la ONU y otras agencias de ayuda fueron retirados a mediados de abril pasado de Chad tras los ataques del grupo rebelde Frente Unido para el Cambio (FUC) en la capital del país, que fueron rechazados por las fuerzas leales al presidente Idriss Deby. Los organismos de ayuda asisten actualmente a más de 200.000 refugiados sudaneses que huyeron de la violencia en Darfur y se asentaron en el este de Chad.
"No creemos que se trate de un atentado dirigido contra UNICEF o la ONU, sino de bandidos", ha dicho. Los ladrones dispararon a poca distancia contra la empleada española cuando ésta se encontraba en las inmediaciones de la localidad de Abeche y huyeron con el jeep, dejándola herida. Posteriormente, fue trasladada a la capital Yamena, donde recibe atención médica hasta que pueda ser trasladada a París.
Personnaz ha señalado que ataques contra personal de la ONU no se habían registrado antes en esa región chadiana, pero recalcó que este episodio deja en claro la necesidad de que las autoridades garanticen la seguridad de las organizaciones humanitarias que trabajan en el terreno. En los últimos meses, los robos a mano armada de vehículos de entidades humanitarias se han incrementado en la zona y han profundizado el sentimiento de inseguridad.
Alrededor de 70 empleados internacionales de la ONU y otras agencias de ayuda fueron retirados a mediados de abril pasado de Chad tras los ataques del grupo rebelde Frente Unido para el Cambio (FUC) en la capital del país, que fueron rechazados por las fuerzas leales al presidente Idriss Deby. Los organismos de ayuda asisten actualmente a más de 200.000 refugiados sudaneses que huyeron de la violencia en Darfur y se asentaron en el este de Chad.